Casi un año atrás Bichos de Campo entrevistó a Pío Silveyra, uno de los consultores especializados en gestión de arrendamientos agrícolas con más experiencia de la Argentina, para intentar entender qué podría haber detrás del desenfrenado interés por arrendar campos agrícolas ante un panorama que no lucía favorable para el negocio.
Silveyra proyectó entonces que la principal hipótesis detrás de esa movida era que el gobierno de Javier Milei iba a reducir o eliminar los derechos de exportación durante la cosecha gruesa 2024/25. Y no se equivocó.
Sin embargo, debido a la caída de los precios internacionales de la soja, esa reducción tributaria sigue resultando insuficiente y, aun considerando rendimientos normales, muchos perderán dinero con la oleaginosa en la presente campaña 2024/25.
La novedad es que este año se está registrando un cambio sustancial en el negocio de los arrendamientos agrícolas, el cual resulta clave ya que se trata del principal costo de la “industria” responsable de generar la mayor fuente genuina de divisas del país.
“Los mayores grupos agrícolas del país –con excepción de uno solo– este año se propusieron reducir el valor de los arrendamientos entre uno y dos quintales de soja por hectárea con respecto a los valores pagados en 2024, aunque eso implique perder grandes superficies de siembra”, remarcó Silveyra.
Las razones de tal estrategia no son un misterio para nadie que conozca el negocio agrícola: si los resultados de la campaña de soja 2024/25 son nulos a magros, los márgenes proyectados para 2025/26 resultan espeluznantes.
¿Se podría considerar, tal como sucedió este año, en una nueva rebaja de los derechos de exportación para 2026? “Si Milei resulta victorioso en las elecciones legislativas nacionales de octubre, no tenga dudas de que tendrá margen político suficiente para seguir realizando muchas de las reformas pendientes, entre las cuales se incluye la reducción de los derechos de exportación al campo”, apuntó el consultor.
El problema –siguiendo esa tesis– es que resulta por demás temerario diseñar un negocio a partir del resultado de una elección legislativa, especialmente considerando que los costos de producción medidos en dólares se vienen incrementando fuerte a causa de la apreciación cambiaria.
Los principales operadores vienen realizando grandes esfuerzos por mantener campos en la zona núcleo pampeana, lo que representa, en la mayor parte de los casos, validar los valores en qq/ha de soja negociados en 2024.
Sin embargo, por fuera de la zona núcleo pampeana las negociaciones están abiertas o directamente cerradas –en algunas casos– ante la reticencia de los propietarios por realizar ajustes a los valores acordados el año pasado.
“El concurso de Los Grobo Agropecuaria claramente encendió una alarma porque muestra que el negocio agrícola está atravesando una crisis de competitividad; en ese marco, grandes grupos prefieren reducir superficie de siembra antes que asumir un riesgo desproporcionado a las inversiones requeridas”, afirmó.
Por otra parte, las empresas maniceras, que hasta el año pasado eran una “locomotora” imposible de alcanzar si se ponían un campo en la mira, este año están con la “billetera” mucho menos holgada
“Vale tener en cuenta que este año, con la implementación del nuevo esquema cambiario, la ‘moneda’ de los propietarios –la soja– se revalorizó mucho en dólares y eso es un aspecto importante por considerar”, resaltó.
La única excepción a la regla este año es Cresud, la compañía agropecuaria de la familia Elsztain, que está muy agresiva en el mercado de alquileres de campos y tiene planes para sumar una gran cantidad de superficie agrícola.
En 2024 Cresud –según el último balance trimestral presentado–sembró 119.549 hectáreas agrícolas en la Argentina, de las cuales 56.613 fueron arrendadas a terceros. Este año quiere llegar a las 141.000 hectáreas en la Argentina de la mano de un aumento del área arrendada.
La compañía –junto con su controlada IRSA– muestra una situación económica y financiera sólida, razón por la cual la agencia calificadora FIX en febrero pasado subió la calificación de emisor de largo plazo de Cresud a la categoría AAA(arg) desde AA+(arg) con perspectiva estable.
El otro factor de demanda es la informalidad, dado que existe un grupo de propietarios que, si bien en los “papeles” negocian un determinado valor, reciben otro tanto por “izquierda” para reducir la carga impositiva.
“Para los que trabajamos en la formalidad, la competencia desleal de los que ofrecen abonar parte del arrendamiento en ‘negro’ representa un problema porque es imposible competir contra eso en muchas circunstancias”, indicó.
Fulbito pa la tribuna
A los propietarios les sobran las propuestas
Tenés toda la razón,,sabes cuándo van a bajar, jajaja
De qué joda hablás?
No entiendo. Los contratistas se hacen los dolobus peeo mientras tanto van creciendo. Y los que arrandamos nos rompimos el cu.lo para tener ese capital !!
Les aumentaron 400% el gasoil, compraron insumos con el dólar blue 1500, vendieron con retenciones a dólar 1100 y quieren sentarse a negociar el alquiler?
Pero estos bichos de campo funcionales a un gobierno timberos están equivocdos
Si la mayoria de la poblacion se sigue cagando de hambre,los legisladores se los meten en el hoyo ,como le paso a macri.Con respecto a los productores…
Hay que ser muy boludo para votar un modelo de dolar barato si vivis de la exportacion,pero bueno ,algun mango en los 3 meses q le quedan de timba a este pais van a levantar(siempre que sepan salir a tiempo)y despues a hacerse la pajota en punta del este hasta que empiece otro modelo…ah y las retenciones van a seguir x que lo exige el prestamista
Puro bla bla.
Las grandes corporaciónes van a seguir pagando, quizás menos, ( un poco) Pero les alcanza para joder al mediano y pequeño productor
Argentina, unico pais del mundo que saca 2 rentas al mismo cultivo. Una renta el alquiler, otra para el que produce el cultivo.
Es inedito, e inviable a largo plazo
En el caso de soja 3 …el estado se lleva más de un tercio
Hay algunos genios que todavía creen que el campo estaba mejor con los peronchos Y están deseando que vuelvan No son más pelotudos xk el día tiene 24hs
El campo le ganó ” la guerra ” en el 2008 y, apenas 3 años después ( 2011) los votó con las dos manos. CFK ganó en la primera vuelta con el 54 % de los votos y lo hizo en todo el interior campero.
En el 2019, los K volvieron a ganar en la primera vuelta y arrasaron también en todo el interior campero. Basta googlear . Parece que el campo los putea, pero los vota. ¿ Cómo es la milonga ??
En el 2023, otra vez los K con Massa como mascarón de proa, salió primero y de pedo no ganó en la primera vuelta. Si no fuera por la pibada, seducida por el peluca estrafalario, hoy los K seguirían en el poder. No jodamos………el campo hace ” la del tero”. Y cuando digo ” el campo” me refiero a todo el sector, no solamente al agrícola.