Trabajadores de Granja Tres Arroyos, una de las principales avícolas del país, se movilizaron el domingo en el centro de Concepción del Uruguay, en Entre Ríos, para reclamar por el pago de salarios adeudados y los recortes que la firma comenzó a hacer en el personal.
La manifestación ocurrió luego de que el pasado miércoles se anunciara, desde la planta La China ubicada en esa localidad, que no habría más faena “hasta nuevo aviso”. Los trabajadores, que se presentaron de todos modos en el lugar, realizaron un corte en el acceso de la planta ese día.
Pero el conflicto no inició ahora sino que comenzó a gestarse en noviembre del año pasado, cuando la empresa decidió recortar un pago adicional que los trabajadores recibían desde hacía años, y que representaba en torno al 20% del sueldo final.
La situación se agravó cuando la empresa presionó a los trabajadores para que firmaran un Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC), que fue aprobado por el gobierno y que implicaba distintos descuentos salariales.
Frente al rechazo de los trabajadores, el directorio de la empresa anunció que podrían despedirse 400 trabajadores. Sin respuesta del gremio, Tres Arroyos envió 80 telegramas de despido que derivaron en un paro general de la planta el pasado 27 de enero.
Eso motivó la intervención de la Secretaría de Trabajo, que dictó una conciliación obligatoria de 15 días durante los cuales debía realizarse la reincorporación de los despedidos, además del pago de los sueldos adeudados.
El plazo se cumplió a inicios de la semana pasada, cuando se realizó una nueva audiencia entre los directivos y la dirigencia del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA), en el marco de la conciliación. Sin embargo, no se llegó a un acuerdo entre las partes y se estipuló un cuarto intermedio hasta esta semana.