Hace varias semanas que los productores ganaderos de la localidad bonaerense de Benito Juárez sumaron una nueva preocupación en sus espaldas. Se trata de una curiosa epidemia de robos en chacras y campos cercanos al casco urbano, cuyo principal objetivo son los cilindros de bronce que hacen funcionar a los molinos, sin los cuales no pueden proveerle agua a la hacienda.
“Es un tema que comenzó este año. Anteriormente escuchamos de algún caso muy aislado pero ahora ya se volvió algo habitual. En la asociación local de productores llevan una casuística de más o menos 70 molinos afectados en el año”, dijo a Bichos de Campo Mariano Boigue, uno de los ganaderos damnificados.
En su caso la pérdida abarcó a dos molinos en un campo que arrienda en la zona, uno de los cuales ya debió ser reparado en forma urgente porque le proveía agua a un lote de cerca de 100 animales.
“Los robos ocurrieron en un radio de cinco a diez kilómetros de la ciudad, y pensamos que es por el tema del bronce. Y no es solo el cilindro que se llevan sino todo el daño que te dejan, porque para sacártelo usan violencia y rompen caños, tiretas, bases, tapas, hay que hacer otro tipo de reparación después. En mi caso fueron dos pero a un vecino le robaron 5 molinos en momentos distintos, y a otro le robaron a pocos días de haberlo reparado”, relató Boigue.
Esto supone una inversión importante en reparaciones por parte de los productores, que estiman gastos en torno a los 400.000 pesos en repuestos, a lo que hay que sumarle otro tanto de mano de obra.
“Todos los gastos dependen de la extensión del daño. En mi caso me debo hacer cargo del arreglo, en otros es a convenir con el dueño del campo”, contó Oscar Dilema, otro de los damnificados, a Bichos de Campo. En su caso el robo se extendió a 9 molinos.
“No solo te cortan los fierros y se roban los cilindros, sino que te lo rompen. En mi caso también se suma un animal carneado, del que solo se llevaron una paleta, y el robo a electrificadores con los que les damos corrientes a las parcelas. Todo esto ocurrió de dos meses a esta parte”, señaló el productor.
Ambos productores coincidieron en que si bien hay una patrulla rural recorriendo la zona, la extensión a cubrir es demasiado amplia, y aunque se hagan detenciones los ladrones son puestos en libertad en pocas horas.
“Hace poco agarraron a una persona que venía con un animal carneado arriba de una camioneta. Lo corrieron, el tipo chocó con un montículo de tierra, lo agarraron y a las dos horas estaba suelto”, lamentó Dilema.
Eso motiva a que no todos realicen las denuncias correspondientes, sobre las que, según pudo saber este medio, aún no hay sospechosos.