Las últimas semanas vienen siendo generosas en oferta de agua, ya que se fueron sucediendo eventos que mejoraron la capacidad de humedad del suelo, oportunamente para apuntalar las siembras de verano que por estos días ocurren.
Buena parte de la Argentina se encuentra en un buen nivel de agua, gracias a estas lluvias. En la última semana se registraron precipitaciones importantes en el centro de la provincia de Chaco y en el este de Salta. También hubo algunas lluvias en el centro de Santa Fe. En la provincia de Buenos Aires los acumulados fueron más desparejos, siendo el noroeste provincial el menos favorecido.
Aunque sigue la expectativa por mejores lluvias, la situación hídrica actual se ve muy mejorada con respecto a un par de meses atrás. Tal vez las mejoras hayan llegado un poco tarde para la fina, en algunas zonas, pero la gruesa se va desarrollando con bastante normalidad.
Sin embargo, hay una zona que acusa falta de lluvias, y de acuerdo a lo que informó la Oficina de Riesgo Agropecuario de la Secretaría de Agricultura, mantiene las condiciones de “sequía”, tal como sucedía hace dos meses.
La zona está comprendida por el vértice noreste de La Pampa, Noroeste de Buenos Aires, y el Sur de Córdoba, donde se esperan grandes expectativas agrícolas este año, al igual que la zona núcleo. Según el informe técnico del organismo, “todavía se clasifican en niveles de sequía el sur de Santiago del Estero y zonas del sur de Córdoba, noroeste de Buenos Aires y noreste de La Pampa”.
En buena parte del resto de Córdoba no se registraron lluvias importantes y se estima un leve desecamiento, esto lleva las reservas a niveles regulares.
Por el contrario, las reservas se mantienen en niveles algo excesivos en el sur de Buenos Aires, ya que se sumaron nuevas lluvias. También en áreas de Entre Ríos se estimaron reservas excesivas, aunque en la provincia predominan los almacenajes óptimos.