La fuerte disminución del poder adquisitivo del salario de los argentino se vio reflejado en los datos recientemente publicados por el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), donde se confirma una una caída del 16% en la venta de los productos lácteos hacia el mercado interno. Esto equivale a una disminución del 13% los litros de leche que se necesitan para producir dichos lácteos.
En el análisis que comprende los primeros cinco meses del año 2024, se observa que son los productos de mayor valor agregado y unitarios los que más fuerte caen. En esta lista figuran los quesos de pasta muy blanda (quesos crema), quesos rallados, leches saborizadas, yogures, flanes y postres. Son productos que han estado sujetos a continuos aumentos de precio y quedan lejos del alcance del bolsillo del consumidor.
En el informe se subraya como dato “muy relevante” que el proceso de fuerte caída del consumo iniciado a finales del año pasado se viene desacelerando y algunos rubros como leches fluidas, quesos, manteca y postres, presentaron mejoras en sus volúmenes en el mes de mayo 2024.
De acuerdo con el informe, de todos modos, las ventas presentaron para el mes de mayo un volumen 6,9% superior al mes pasado y en litros de leche equivalente se incrementaron un 4,8% en la comparación total mensual, Es decir, comenzaron a mostrar síntomas de recuperación, o de que el menos se atenúa la caída.
Es un pobre consuelo. En la comparación interanual (de mayo de 2024 versus mayo de 23023) los especialistas indican una disminución en volumen del 11,4% y una caída del 11,3% en litros de leche equivalentes.
Mas allá de las bajas y subas de ventas de los diferentes productos lácteos hasta mayo, lo concreto es que existe una tendencia a la baja tanto en las ventas como en el consumo. Esta situación ha provocado “la primarización de productos más básicos” como leches fluidas no refrigeradas, quesos al peso de segundas y terceras marcas y yogures bebibles de litro, por encima de otros productos con mayor valor agregado y más costosos, indicó el OCLA.
En tanto, “el Balance Lácteo, que dispone de los valores de producción, existencias, importaciones y exportaciones, para los primeros cinco meses del 2024 determinó una caída del consumo doméstico total del 18% y del 20% en el consumo per cápita, medido en litros de leche equivalentes. Mientras la Resolución 230/16 que captura algo más de 60% de las ventas totales, establece que en los primeros 5 meses del año el total de litros de leche equivalentes vendidos en el mercado interno fue de menos 13,7%,”.