En la ciudad cordobesa de Villa María se dieron cita varias empresas y especialistas en agroinsumos para participar del Tercer Encuentro Nacional sobre producción con bilógicos (EnBio2024). En el intercambio se constató que en el país crece anualmente el uso de bioinsumos en un contexto donde los agroquímicos ya no son capaces de responder a los desafíos que imponen las crecientes resistencia y el cambio climático. Por eso, la velocidad de adopción es más veloz que la de los tradicionales agroquímicos.
“En Argentina, la perspectiva de crecimiento es mayor que en químicos. Mientras que el uso de biológico crece entre el 10 y 12% anual, el uso de químicos está casi estancado con una expectativa de crecimiento de entre el 3 y 5% anual”, aseguró Gustavo González Anta, director científico de Indrasa, una empresa biotecnológica que ofrece soluciones para el agro y la industria.
En este sentido, varios de los especialistas también aportaron datos que evidencian el alza del uso de biológicos a escala local y también mundial. El de los bioinsumos agrícolas es ya un mercado que mueve 8.600 millones de dólares. Esta suma se distribuye fundamentalmente en biocontrol, que representa el 56% de las ventas, mMientras que los bioestimulantes y biofertilizante son el restante 44%.
En este sentido, González Anta explicó que en el caso argentino, los biofungicidas y bioinsecticidas son la mejor alternativa para manejar situaciones de resistencia de hongos y plagas a los químicos. “Los productos bio mutan como los hongos, van cambiando y controlando. La posibilidad que aparezca resistencia de un hongo a un biofungicida es mínima. Para el futuro imaginamos cepas microbianas modificadas genéticamente para modificar funciones metabólicas específicas, por eso decimos que la agricultura moderna es con biológicos.”
En el seminario realizado en la Universidad Nacional de Villa María se abordó el caso de Brasil, un país que presenta mayor crecimiento en este tipo de tecnologías. Su mercado se acerca a 1.000 millones de dólares en esta campaña y se reparte en el 80% para biocontrol y el 20% para biofertilidad.
Por otra parte, Eduardo Pérez, representante de Casafe, la cámara que agrupa a los grandes fabricantes de agroquímicos, subrayó que los biológicos son la nueva tecnología porque logran un aumento del sistema radicular, suelos más sanos, menos caga química y producciones más sostenibles y rentables. “No se cuándo, pero para mí los biológicos van a reemplazar a los químicos, son el futuro de la agricultura porque es lo único que promete más productividad”, aseguró.
Siguiendo la misma línea, desde la otra cámara del sector de agroinsumos y fertilizantes, la Ciafa, el agrónomo Armando Allinghi reveló los números de la última encuesta que hicieron para demostrar que “el mercado de especialidades creció 10% entre el 2021 y 2022, logrando un total de 470.000 toneladas”.
“En Argentina bioestimulantes y biofertilizantes son los productos de mayor crecimiento. Este sector de bioinsumos está en pleno crecimiento y el mercado se encuentra en una etapa de redimensionamiento”, explicó el experto.
El tercer Encuentro Nacional sobre Biológicos, organizado por Agribio y TodoAgro, fue cerrado por Germán Di Bella, actual subsecretario de Agricultura de la Nación, y Nicolás Bronzovich, director de Producción Vegetal de la Secretaría del mismo área de gobierno.
“La visión de la sustentabilidad para nosotros es el equilibrio entre lo social, lo ambiental y lo productivo. Un equilibrio que se facilita gracias a la Bioeconomía. La Bioeconomía es un Modelo de convergencia para el desarrollo sustentable”, dijo Bronzovich, manifestando el apoyo del gobierno a la adopción de este tipo de insumos por parte de los productores.