De que el gobierno de Javier Milei vino a desacomodar muchas cosas ya no caben dudas. Luego se verá si es para bien o para mal.
Tanto es así que se dio vuelta la taba, y mientras las entidades de la Mesa de Enlace ahora callan sorpresivamente ante una masiva suba de las retenciones a los granos y la carne y muchas economías regionales, son las cámaras agroindustriales las que pusieron el grito en el cielo ante este nuevo manotazo fiscal sobre el sector.
En rigor, en un duro comunicado, el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) expresó “su profunda preocupación y rechazo a la Sección VI (Derechos de Exportación) del Proyecto de Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos que fuese remitido por el Poder Ejecutivo al Congreso de la
Nación”. Es el referido a las retenciones, que subirían en el caso de la soja y el resto de los granos, las carnes y varias economías regionales que venían tributando 0% y ahora deberán dejar 15% de su facturación en la Aduana.
“El CAA reitera que este tipo de proyectos con subas de derechos de exportación son contradictorios con la generación de empleo, producción y exportaciones que ha expresado el gobierno”, dice este conglomerado de 60 cámaras del sector agroindustrial, que se formó en 2019 y del cual no participan las entidades rurales de la Mesa de Enlace, a excepción de Coninagro.
Desde ese sector, que representa a los productores primarios (sobre todo de granos y carnes, que son los productos más afectados), se guarda un llamativo silencio sobre las medidas. Por el contrario, la Mesa de Enlace convalidó esta suba negociando algunas excepciones para economías regionales con el secretario de Agricultura, Fernando Vilella.
Si bien son los productores los que suelen sufrir las retenciones (ya que las empresas exportadoras les descuentan ese tributo de sus precios de compra), las voces más críticas a la ofensiva de Milei surgió del CAA, donde tallan las exportadoras y las bolsas de cereales, además de muchas industrias transformadoras de los productores del campo.
“Si bien se comparte la necesidad de alcanzar el equilibrio fiscal, dicho objetivo no sucederá aumentando impuestos a economías regionales agroindustriales y otras cadenas de valor agroindustriales exportadoras como carnes, pesca, complejo industrial de la soja y del trigo, entre otros”, explicó el CAA sobre su rechazo.
El Consejo Agroindustrial avisó que “alertará de esta errónea decisión a los legisladores y procurará que se corrija y elimine la suba de derechos” de exportación dispuesta por Milei y su ministro Luis Caputo.
A modo de despedida, mostrando desilusión, el comunicado del CAA recordó que “el gobierno entrante anuncio en su campaña que iba a eliminar la facultad del Poder Ejecutivo de imponer derechos de exportación y que procedería a no imponer este tipo de impuestos”.