Juan Schiaretti, el gobernador de Córdoba y precandidato a presidente en las elecciones de octubre por el llamado Peronismo Federal, volvió a mostrarse muy conciliador con el campo en su presentación ante los productores y delegados de la Sociedad Rural Argentina (SRA), en el desfile de candidatos por el predio de Palermo. Como gobernador peronista (el otro de ese origen fue Miguel Ángel Pichetto, pero en ese caso el pase a la oposición se produjo hace años), el cordobés tomó distancia inmediatamente del actual gobierno de Alberto y Cristina: “Basta de que al actual gobierno kirchnerista trate al campo como si fuera su enemigo; el campo es la patria, el futuro, la producción y el trabajo”, proclamó.
El gobernador de la principal provincia agrícola de la Argentina comenzó endulzando los oídos de los productores, a quienes les asignó -junto a otras actividades como la minería, la energía o la pesca- la posibilidad de que “se desarrollen y traigan los dólares que necesitamos”.
“La Argentina tiene un déficit fiscal crónico. Esto origina dificultades porque cuando uno tiene déficit van y le prestan, hasta que no le prestan más, entonces defaultea la deudas y se pone a emitir con la maquinita”, resumió Schiaretti la tragedia nacional.
Tomando distancia de otros candidatos que se presentaron aquí, en especial Patricia Bullrich y Javier Milei, este político evaluó que “solucionar el déficit no significa que tenga que haber un ajuste salvaje”. En este punto sugirió “no gastar más en cosas superfluas”. Propuso eliminar gastos superpuestos entre Nación, provincias y municipios, reducir mucho los subsidios a la energía, y apuntó que “no puede haber empresas públicas que sean deficitarias”, sugiriendo que se podrían privatizar algunas que están en esas condiciones.
Schiaretti dijo que en caso de llegar al poder impulsará “un programa de estabilización en serio, no parche sobre parche como esta aplicando el actual gobierno kirchnerista”. Repitió varias veces dos conceptos como para establecer una mayor diferenciación con sus ex compañeros de ruta: generar confianza y dar certezas, prometió.
“Que seamos simplemente un país normal, con sentido común, la Argentina va a salir más rápido que tarde. Los vientos internacionales juegan a favor”, indicó.
A la hora de anticipar qué haría, el cordobés indicó que propiciará una rápida eliminación de las retenciones, y en todo caso su eliminación progresiva por el impuesto a las ganancias (tomando a cuenta los aportes del sector), y la eliminación de inmediato de la brecha cambiaria. Remarcó que son dos rarezas que no existen el el resto de los países de la región, como Uruguay, Brasil o Bolivia.
“La manera de trabajar es juntos, no hay forma de poder mejorar. Yo estoy seguro que si le saco el pie de encima al campo y lo dejamos producir mas, argentina vamos a conseguir mayor progreso y muchas más divisas genuinas de las que hoy está aportando. Me parece central”. aseguró, confiado en que los productores siempre reinvierten en su zona, y para lograr mayor producción.