La Cancillería informó este domingo, con bombos y platillos, que “luego de 5 años de gestiones realizadas por la embajada argentina en México y de negociaciones fitosanitarias llevadas persistentemente adelante por el Senasa”, el gobierno de México autorizó la importación a aquel país de “arroz palay” de Argentina.
¡Qué bueno! ¡Maravilloso! México suele ser un mercado bastante esquivo a la hora de comprar alimentos de origen argentino y será una gran oportunidad comercial que nos compre “arroz palay”. Lástima grande que aquí en la Argentina no tengamos ni idea de qué es eso.
En Bichos de Campo, frente a la difusión de la muy buena noticia por parte de la Cancillería, nos vimos envueltos en un dilema: o bien podíamos repetir el título del comunicado oficial como hicieron la mayor parte de los medios o bien podíamos intentar averiguar qué quería decir el canciller Santiago Cafiero a la hora de hablar del misterioso “arroz palay”. Nosotros, que cubrimos agro desde hace rato, jamás habíamos oído hablar de esa variedad.
La conclusión de nuestra breve investigación fue que Cafiero se convirtió en mariachi y comenzó a hablar con vocablos mexicanos con tal de venderle un kilo de cualquier cosa a los mexicanos, que se supone tienen con Andrés Manuel López Obrador un presidente que es “amigo” de Alberto Fernández y de la Argentina.
De hecho, debimos recurrir a una página oficial del gobierno de México para tratar de entender lo que nos informó aquí la Cancillería y finalmente descubrir que el “arroz palay” es simplemente el arroz que internacionalmente se conoce como “arroz paddy” o sencillamente “con cáscara”.
“El arroz paddy es el grano de este cereal justo después de su recolección. Aún dispone de su cáscara natural y de todas sus propiedades nutritivas”, es la definición habitual de ese producto.
“El arroz palay es aquél que aún conserva la cascarilla (glumas) o cubierta, con una textura ligeramente áspera. El color del grano es amarillo paja a café claro”, es la confirmación del gobierno mexicano sobre el asunto.
Resuelto este misterio, ahora sabemos que México comenzará a aceptar arroz argentino, en una de sus variantes comerciales habituales. De hecho, era arroz paddy el que exportaba la Argentina a la Venezuela de Hugo Chávez, en aquellos días de enorme armonía política entre los gobiernos de ambos países. Al ser arroz con cáscara, y tener por lo tanto menor proceso industrial, suele tener menor valor en el mercado.
Cafiero, hablando todavía en mexicano, recordó que en mayo pasado realizó una visita a ese país y demandó la apertura de este negocio al secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, “Se abordó una amplia agenda entre la que se encontraba el ingreso del arroz palay argentino al mercado mexicano”, describió de modo incompleto, porque en realidad la negociación sanitaria con los mexicanos era por todos los tipos de arroz a granel.
Nos lo explicó alguien que sabe y habla en argentino. Tras confirmar que el arroz palay no es otra cosa que el arroz paddy, el industrial arrocero entrerriano Jorge Paoloni contó a Bichos de Campo que desde hace varios meses el sector viene trabajando con las autoridades en la habilitación no solo a esa variedad sino a todo el universo de variedades de arroz, pues lo único que había abierto hasta ahora México era el arroz envasado y pulido, pero no aceptaba todavía el resto ni el grano a granel, ni el con cáscara ni el integral.
“Ellos nos pedían estar exentos de algunas plagas. El Senasa fue aunando criterios y ahora se puede exportar arroz desde cáscara para arriba, en todas las modalidades”, contó Paoloni, ampliando la buena noticia que la Cancillería no supo ni pudo ver y comunicar correctamente. De todos modos, el dirigente de los arroceros entrerrianos aclaró que si se concretan negocios, esto será recién después de la nueva cosecha argentina 2022/23, y dependiendo de los precios y las condiciones económicas.
“Así como estamos, no somos competitivos para exportar arroz a ningún país del mundo”, avisó.