La faena vacuna sigue en aumento y avala el argumento que los privados sostuvieron ante las autoridades de la Secretaría de Agricultura para reclamar un incremento en los cupos de exportación de carne, que aumentaron el 15% a partir de septiembre y podrían ampliarse en los meses que vienen si esta tendencia continua.
La mayor oferta de ganado hacia los frigoríficos también explica la falta de reacción de los precios de la hacienda, que tienen un retraso muy evidente que llega a casi el 30% en términos reales con relación a abril pasado, último mes en los que hubo subas en los valores de los bovinos.
En agosto pasado, los productores vendieron a los frigoríficos 1,29 millones de vacunos, lo que significa un incremento respecto de igual mes del año pasado de 6,6%, de acuerdo con la información difundida por Senasa. Así en lo que va del año los envíos a faena sumaron 8,9 millones de animales, lo que da cuenta de un aumento del 5% respecto de los primeros ocho meses de 2021.
El mes pasado se mandaron a faena 346.300 novillos y el incremento en esta categoría fue de 5,6%. En este caso el incremento se debe a que en 2021 hubo más animales en recría que luego pasaron por los corrales de terminación y ahora se ofrecen al mercado.
En las categorías livianas se dieron los incrementos más marcados. Las remisiones de novillitos sumaron 294.000 cabezas y el aumento fue de 9%, mientras que en vaquillonas se enviaron 257.000 cabezas con una suba del 15%.
En estos dos casos está influyendo el mayor encierre que se produjo desde abril-mayo, cuando la seca obligó a la salida de los terneros de los campos de cría directo a los corrales y sin paso previo por los campos de recría.
La categoría que menos creció fue la de vacas: el aumento fue de 2,5% y también es consecuencia del impacto de la seca que se sigue sintiendo a pesar de que ya se superaron los tactos.
En terneros y terneras se dio una caída de 5% en los envíos a faena, aunque la suma de estas dos categorías es menor y apenas significan 60.000 vacunos.
Lo que se espera para los próximos dos meses al menos es que se sostengan altos los niveles de oferta, para que luego, en el último tramo del año, comience a notarse el faltante una vez que los feedlots se hayan vaciado.
Según las últimas informaciones del sector privado, los engordes a corral están reduciendo su nivel de reposición y eso augura una oferta baja en el cierre del 2022 y una posible reacción de los precios, que el sector requiere para corregir las cuentas.