El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) extendió hasta la mitad de 2019 la declaración de “emergencia fitosanitaria nacional” por el avance de la plaga Lobesia botrana o “polilla de la vid”, un insecto que ya está presente en las principales zonas vitivinícolas del país.
La declaración se efectuó mediante la Resolución 583-E/2017, que fue publicada en el Boletín Oficial con la firma de Jorge Dillon, titular del organismo.
“Se declara la Emergencia Fitosanitaria con respecto a la plaga Lobesia botrana en todo el Territorio Nacional hasta el 30 de junio del año 2019, debiéndose adoptar y/o fortalecer las tareas de control, prevención y vigilancia consecuentes al mismo”, dice el artículo inicial de esa resolución.
A continuación, el Senasa definió cuál será la estrategia de control de la plaga mientras dure la emergencia. “Se implementará una estrategia de intervención a nivel regional en las áreas donde haya sido detectada su presencia con el objeto de evitar su establecimiento y dispersión hacia otras áreas, en función de los resultados del monitoreo oficial”.
Es decir, en cada región vitivinícola se adoptarán medidas de emergencia como diversos controles y regulaciones sobre los movimientos de uva para vinificar y la “obligatoriedad de implementar y aplicar las actividades de control químico-biológico y prácticas culturales”, haciendo corresponsables a los productores.
“Se faculta a la Dirección Nacional de Protección Vegetal a adoptar las medidas técnico-administrativas extraordinarias acorde al estado de emergencia declarado por la presente resolución, priorizándose aquellas áreas donde la plaga haya sido detectada”, afirma la resolución, que claramente apunta a dar facultades adicionales a las autoridades sanitarias.
El Programa Nacional de Prevención y Erradicación de Lobesia botrana apunta a controlar la plaga en las áreas cuarentenadas, a fin de lograr su erradicación en los sitios con baja presión y su supresión en los sitios con alta presión, a fin de evitar la dispersión de la polilla hacia el resto del país.
En la actualidad, reconoce el Senas,a se encuentran bajo cuarentena 170.000 hectáreas de vid ubicadas en Mendoza y san Juan, pero ejemplares de la plaga se han encontrado también en las zonas vitivinícolas de Salta.