Luego de conocerse que el resultado del tercer muestreo realizado en la granja avícola comercial Santa Ana, en la localidad correntina de San Cosme, dio negativo, la presidenta del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), Diana Guillén, anunció en una conferencia de prensa que finalmente se levantaría la interdicción y que se autorizaría el movimiento de productos. Todo esto sin dejar de hacer un seguimiento epidemiológico de la situación.
“Desde el Senasa necesitamos que se siga produciendo carne aviar, queremos que se sigan produciendo huevos, queremos que haya abastecimiento en la Argentina y queremos volver a recuperar las exportaciones de productos avícolas, cómo lo venimos haciendo. Está claro que no queremos que se mueran las aves”, afirmó la titular de la cartera sanitaria. Sin embargo, esto no sería suficiente para aplacar el malestar de la empresa avícola que reforzó el pedido para seguir adelante con la investigación del caso.
“Realizamos una denuncia penal el pasado día domingo. Lo que estamos pidiendo ahora obviamente es que el proceso de investigación siga su curso y se acelere”, dijo a Bichos de Campo Armando Rafael Britos, abogado de Avícola Santa Ana.
-¿El objetivo ahora es seguir adelante con una investigación contra el accionar de Senasa?- le preguntamos.
-Claro, para deslindar responsabilidades y ver dónde estuvo este proceso desafortunado por el cual una muestra dio positiva y otras tres negativas. Evidentemente algo pasó con la primera muestra.
-¿Cómo se llevará adelante esa investigación?
-Ya hicimos la denuncia ante Gendarmería, de allí pasó a la Fiscalía y ellos deben instrumentarla. Pedimos que manden las muestras del laboratorio, las nuestras y la prueba en donde se obtuvo el virus. No desconfiamos del laboratorio pero estamos seguros de que el primer testeo no se corresponde con la realidad de la Avícola Santa Ana. Como consecuencia sospechamos que por ahí el virus de San Cosme se pudo haber inoculado, voluntaria o involuntariamente, en las muestras de Avícola Santa Ana.
-¿Ustedes consideran que alguien introdujo el virus para que las muestras dieran positivo?
-Eso lo tiene que investigar la Justicia.
-¿Pero una de las hipótesis que barajan es esa?
-Claro, por supuesto.
-Se habló de la posibilidad de que alguien vehiculizara el virus en la indumentaria de quienes ingresaron o incluso en algún vehículo. Hablar de inoculación del virus ya contempla la malicia.
-Muchas hipótesis se pueden dar ya sea por error, en una situación involuntaria o por malicia para perjudicar al establecimiento. ¿Por qué no pensar en que a alguien le puede interesar esa actividad que desarrolla la empresa, el volumen de comercialización, la incidencia que tiene en el medio? Hay miles de factores y todos deben ser analizados al momento de tomar decisiones.
A continuación, Britos agregó: “Somos grandes. Todos más o menos tenemos uso de razón. La experiencia común dice que si el virus es influenza aviar y anda dando vueltas en el aire, se va a las gallinas, no al dueño del establecimiento, a sus empleados, etc. Dado que esto tiene relación directa con las aves, en estos momentos estaríamos asistiendo a un cementerio de animales”.
-¿Ustedes apuntan a la inoculación directa de animales?
-No, por inocular me refiero a inyectarlo a la muestra que se extrajo por primera vez en Avícola Santa Ana, por gente que quiera perjudicarla. La hipótesis de que el virus anda dando vueltas en el aire es la que maneja la titular de Senasa y ni ella se la cree.
-¿La empresa va a hacer algo para pedir resarcimiento?
-No lo sé. Ellos quieren volver a trabajar. Es lo que conocen y hacen desde siempre. Quieren que el autoritarismo, que la prepotencia, que la malicia desaparezca de su horizonte, porque no están acostumbrados a estas cosas. Es gente de trabajo. Esa es la gente que los funcionarios nacionales deberían tener de referencia.
-En función de los dichos de Diana Guillen en el día de ayer, en una conferencia de prensa que realizó en Corrientes, ¿cuál es el argumento de Avícola Santa Ana respecto a estos primeros test que Senasa dice que ustedes no realizaron bien?
-Justamente por eso es que queremos acelerar la investigación de la denuncia que realizamos.
-¿Pero reconocen la posibilidad de que el primer error haya sido de ustedes?
-En su oportunidad se señaló que la muestra no se extrajo y no se hizo, jamás puede dar positivo. De eso se tienen que hacer cargo. Tienen que demostrar qué genoma del virus han analizado porque eso no se corresponde con ninguna de las otras tres muestras que se han extraído de la Avícola.
-¿No es un error en primera instancia que la empresa no haya hecho ese primer análisis?
-Ese error tendría que ser incluso de Senasa porque son ellos los que tienen que tomar la muestra como la tomaron después.
-Senasa afirma que se dejó un kit para que ustedes tomen las muestras.
-Con ese criterio yo puedo pensar que algún funcionario de Senasa inoculó el virus para dañar a la empresa.
-¿Entonces no reconocen como un error el hecho de no haber realizado ese primer estudio que sí deberían haber hecho?
-Nosotros reconocemos un error involuntario de parte de la gente de la empresa. Se explicó con lujo de detalles el motivo y aún así eso no habilita que a uno le planten un virus desde cualquier área de Senasa.
-¿Cuál es el error involuntario que sí reconocen?
-Que el señor padeció un ataque por una enfermedad oncológica que tenía y se tuvo que trasladar rápidamente al baño. La veterinaria pensó que las muestras se habían realizado pero el señor no las pudo hacer porque tuvo esta descompensación fuerte, producto de esa enfermedad que tiene. Ella entregó entonces estos testeos sin haberse realizado. Esto se explicó en una denuncia que hicimos y está justificado porque el padecimiento del trabajador de la empresa es notorio y evidente. Esto no habilita que aparezca una muestra positiva. De última se dice que no se hizo la muestra, pero jamás puede aparecer un resultado positivo.
-Más allá de todo lo acontecido, ¿la empresa seguirá adelante con la aplicación del protocolo de monitoreo contra la Influenza Aviar?
-No se negará ninguna medida que implique garantías en cuanto al sistema de bioseguridad, a los controles periódicos, a garantizar la sanidad animal. De hecho, el juez y todo el equipo de Senasa vieron la calidad de las instalaciones, la forma en que se trabaja. Si bien es una pyme de mediana envergadura, estas cuestiones están absolutamente garantizadas.
Repito: no hay ni un solo organismo estatal que no haya sido arruinado con militantes de la banda delictiva perokirchnerista. No tienen profesionales preparados sino militantes fanáticos a quienes solo les interesa beneficiar a la banda y a su ideologia.