En Bichos de Campo solemos quejarnos a viva voz de que los voceros oficiales y las oficinas de prensa de muchos organismos públicos más que trabajar para difundir los actos de gobierno, como debería suceder, han pasado a poner su máximo esfuerzo en administrar y hasta ocultar la información que se genera desde el Estado.
Esta especie de “privatización” de la información pública -porque finalmente se pone a gente que trabaja dentro del Estado a trabajar en función de los intereses del político/funcionario de turno- es un mal de época, una tendencia de fondo aquí y en el mundo. Es decir, trasciende a los gobiernos. Pero mal se puede corregir en el caso de una gestión en la que el máximo responsable suele decir que “todavía no odiamos suficiente a los periodistas”.
Cada 1° de septiembre, se celebra en la Argentina el Día del Periodista Agropecuario. La conmemoración hace referencia a la publicación del primer periódico con información vinculada al campo, en los albores del Siglo XIX, ya que ese mismo día de 1802 Hipólito Vieytes editó por primera vez el Semanario de Agricultura, Industria y Comercio.
En el marco de esta conmemoración de una especialidad periodística que tiene a sus protagonistas distribuidos por toda la geografía, las asociaciones que nos agrupan en cada una de las regiones se pronunciaron muy saludablemente, reclamando a los diversos niveles de gobierno, pero en especial a la Secretaría de Agricultura de la Nación, que colabore a “construir un sistema de comunicación más transparente, democrático y respetuoso del rol que a cada uno nos corresponde”.
Algo así como para trabajar juntos para mejorar la información pública, y facilitarle la tarea a todos los periodistas agropecuarios del país. “Todavía no los queremos demasiado”, debería ser la nueva consigna que dispare un necesario proceso para que la información pública fluya hacia los periodistas que se ocupan -es la razón de su oficio- de digerirla y transmitirla a la sociedad.
“En este Día del Periodista Agropecuario renovamos el compromiso con la pluralidad, la verdad y el servicio público. Y proponemos trabajar juntos -autoridades gubernamentales, entidades y periodistas- para construir un sistema de comunicación más transparente, democrático y respetuoso del rol que a cada uno nos corresponde”, dice el comunicado que firman la Asociación Bonaerense de Periodistas Agropecuarios (Abopa), la Asociación de Entidades y Periodistas Agropecuarios del NOA (AdepayNOA), la Asociación Entrerriana de Periodistas Agropecuarios (AEPA), la Asociación de Periodistas Agroalimentarios de la ciudad de Buenos Aires, el Círculo de Periodistas Agropecuarios Thay (Círculo Thay) y el Círculo de Periodistas y Comunicadores Agropecuarios de Córdoba (Cipag).
Tristemente, mostrando que las miserias no son exclusivas de la política, no firmó la respetuosa nota el Círculo Argentino de Periodistas Agrarios (Capa), la entidad más veterana que debería agrupar a todas las otras.
“Pedimos el cumplimiento de un principio básico: la información debe estar disponible sin discrecionalidad ni demoras. Solo así podremos ejercer el oficio y garantizar a la sociedad un acceso veraz y oportuno a temas que impactan en su economía, el ambiente y la vida cotidiana”, dicen las asociaciones de todo el país, que exhortan al Ministerio de Economía, a la Secretaría de Agricultura y demás organismos públicos del sector, a implementar un sistema de comunicación abierto, directo y equitativo”.
“La información no puede quedar dispersa en sitios poco accesibles ni restringida a redes sociales: debe llegar a todos los periodistas agropecuarios de manera simultánea, clara y transparente”, señalaron los periodistas agropecuarios.