La campaña fina se encuentra transitando un momento clave, ya que está empezando la etapa en que los cultivos demandan mayor cantidad de agua disponible en el suelo. Y las condiciones climáticas no ayudan para lograr los rendimientos esperados.
De acuerdo a lo que informó la Bolsa de Comercio de Rosario, hubo una mejoría en las regiones que recibieron precipitaciones, “pero la situación es crítica dónde no llovió. Se trata de la porción central de la región núcleo: sur de Santa Fe y norte de Buenos Aires, dónde ya hace tres meses que no hay lluvias de importancia. Allí, el trigo empieza a encañar con el 48% de los lotes regulares y malos”.
Es por esto que la entidad rosarina detalla: “Es muy preocupante la falta de agua. Un 10% de los trigos ya están encañando. Los requerimientos aumentan y las lluvias no acompañan”, dicen desde Bigand donde ya esperan fuertes caídas de rendimiento. En Pergamino y Colón tampoco llovió y hablan del deterioro: el 40% de los cuadros están regulares. En General Pinto las lluvias de esta semana “permiten reactivar al cereal, sin embargo son insuficientes para mejorar el 30% de los cuadros que lucen en estado regular y que ya acusan mermas en el rinde potencial”. Pero donde llovió, como en Carlos Pellegrini, El Trébol, Cañada Rosquín y Marcos Juárez, los trigos han repuntado y se mantienen las expectativas de rinde.
La falta de lluvias de importancia durante los días precedentes hace importante analizar el estado de las reservas de humedad en el suelo. Y es por esto que la Bolsa de Rosario añade: “A pesar de las lluvias de esta semana y de los abundantes acumulados para la época que tuvieron lugar sobre Córdoba y Santa Fe desde el 21 de julio, las reservas no han tenido una recuperación significativa en la región núcleo. Al 17 de agosto, el 40% de región núcleo está bajo condición de sequía y el resto con escasez hídrica. Solo un acotado sector en la provincia de Buenos Aires presenta humedad regular”.
Este panorama es compartido por la Oficina de Riesgo Climático de la Secretaría de Agricultura, quien informó que solo una parte de Buenos Aires mejoró con las lluvias, pero buena parte del país está necesitada de precipitaciones: “Las escasas precipitaciones de la semana provocaron el aumento de las reservas de agua en suelo de la zona sudeste de Buenos Aires, donde se incrementaron los lotes con excesos hídricos o reservas excesivas. Santiago del Estero, Tucumán y Córdoba, continúan con niveles críticos de humedad en suelo. La mayor parte del terreno se encuentra en niveles de reservas escasas o sequía, y no se pronostican lluvias para la zona en esta semana que comienza. La Pampa tuvo un retroceso en sus reservas, manteniéndose principalmente en niveles regulares de agua en el perfil”.
A futuro la cosa no parece mejorar, sobre todo empezando a pensar en la disponibilidad de agua para la siembra temprana del maíz. En ese sentido, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires emitió un informe climático bastante pesimista para los próximos días: “La mayor parte del área agrícola registrará precipitaciones escasas (menos de 10 mm) con focos con valores moderados. Solamente la mayor parte del Paraguay y el norte de la Mesopotamia observarán precipitaciones moderadas a abundantes (10 a 50 mm)”.