La Argentina está registrando niveles récord de producción de etanol a base de maíz. La oferta se incrementa año a año y Córdoba es el motor principal de ese aumento. Lo curioso es que esta tendencia de mercado se da en contra de lo que definió la nueva Ley de Biocombustibles impulsada en 2021 por Máximo Kirchner y el Frente de Todos: allí se mantuvo el corte de nafta con etanol de caña de azúcar, reduciendo la participación de originado en maíz.
En rigor, hasta esa ley -que fue aprobada en el apogeo de poder del líder de La Cámpora- la participación en el corte era de 6% para el bioetanol de maíz y otro 6% para el bioetanol de caña de azúcar. Luego de la intervención de Máximo se eliminó casi la participación del primero y se mantuvo el segundo. Pero la realidad se impuso y en 2021 el biocombustible se impuso. esta tendencia se confirmó en los primeros meses de este año, pues es finalmente el complejo maicero el que aporta el grueso del biocombustible necesario.
De acuerdo a un informe económico de la Bolsa de Cereales de Córdoba, en el acumulado a abril de este año, se registró una producción récord de 202,5 miles de metros cúbicos, con un desplace del biocombustible fabricado con caña de azúcar al que utiliza maíz como base.
La industria etanolera que en Argentina aporta este biocombustible para el corte obligatorio de las naftas (como sucede con el biodiésel en el gasoil) se basó originariamente en la caña de azúcar. Hacia 2013 la composición de la producción era 65% a partir de ese cultivo regional y sólo 35% en base a maíz. A partir de 2014 esta relación se revertiría hasta alcanzar un promedio de 52% del etanol en base maíz para los últimos tres años.
En lo que se refiere al etanol en base al cereal, la industria nacional se expandió rápidamente desde 2014, “con una tasa anual promedio de crecimiento de 7%, llegando a una industrialización máxima de 585 mil m3 en 2018, para luego ubicarse en 534 mil m3 en 2021 tras la caída que sufrió la industria durante la pandemia provocada por el Covid”, explicaron desde la entidad cordobesa.
La suma del etanol producido en todo este período equivaldría a transformar y agregar valor a 10,6 millones de toneladas de maíz, del cual 74% sería industrializado en Córdoba.
Demostrando el poderío y el potencial de la provincia mediterránea en la producción de etanol de maíz, la Bolsa cordobesa contó: “Respecto al etanol de maíz, en 2021 Córdoba representó el 80% de la producción nacional, seguido por San Luis con una participación del 19% y finalmente Santa Fe con una producción del 2%. Para tal año la producción cordobesa alcanzó los 426 mil m3”.
Para concluir, la Bolsa de Cereales de Córdoba realizó una simulación donde se muestra el biocombustible necesario si el corte con naftas se elevara a diferentes niveles. Para satisfacer la demanda de etanol requerida en 2021 se industrializaron 1,40 millones de toneladas de maíz, ya que un 48% del etanol fue elaborado en base a caña de azúcar.
Si el corte se llevara a un nivel similar al de Brasil (27%), Argentina hubiera requerido 2,35 millones de m3 para satisfacer la mezcla en 2021, llevando a una industrialización de 4,6 millones de toneladas del cereal.
“Si bien esto requeriría una expansión de la capacidad máxima instalada en la industria, que para 2022 se estima en 1.436.000 toneladas de maíz en Córdoba, se podría agregar valor a un alto porcentaje de la cosecha de maíz argentina” explicaron desde la Bolsa.
El problema no es Máximo. Y la nueva Ley BIO no se cambia mas por la imposibilidad de contar las mayorías parlamentarias. El problema son los intereses petroleros que no soportan que se les metan en su negocio. El esquema es perfecto: tienen el buque insignia (YPF, que como empresa no gana pero “derrama” negocios a mansalva con sus importaciones, proveedores, etc ) que supuestamente responde a los intereses de los Argentinos y resulta que beneficia a las otras ´petroleras impulsando politicas afines a los intereses de estas (barril criollo, cortes, precios fijados por la Secretaría de Energía siempre comandada por estos, etc). Muestra de esto es lo que pasa ahora: a quien se le ocurre que no saben calcular la demanda de gasoil para el mercado interno. Estos dimes y diretes llevaron a este esquema de precios diferenciales donde el campo tiene que pagar el gasoil con sobreprecios de fantasía ya que con un 3% de demanda insatisfecha con un mercado tan inelastico, el precio es el que el oferente tenga ganas. Está probado el poder de lobby y recursos con que cuentan los petroleros…. EL politico de turno es solo circunstancial.