La provincia argentina de Tierra del Fuego y provincia china de Shaanxi firmaron este martes un memorando de entendimiento para brindar apoyo a la compañía estatal Shaanxi Coal Industry Chemical Group en un plan de inversiones orientado a proyectos de energía e industrias químicas en Tierra del Fuego.
La rubrica del memorando estuvo encabezada por el gobernador fueguino Gustavo Melella, acompañado de manera remota en la ciudad de Buenos Aires por el secretario de Industria de la Nación, José de Mendiguren.
Un comunicado oficial de Tierra del Fuego indicó que gracias al memorando “se logrará activar el proyecto de producción de fertilizantes en la provincia, a través de la inversión de 1250 millones de dólares desde la firma china Shaanxi Coal and Chemical Group, con una planta con capacidad de 900.000 toneladas de urea y 600.000 toneladas de amoníaco sintético al año, entre otros productos”.
Además aseguró que la planta –que se abastecería de gas natural producido en la provincia austral– se convertiría en la planta “con mayor tecnología de Latinoamérica y abastecería al mercado interno y exportaría sus excedentes”.
🇦🇷🇨🇳 Firmamos junto al Gobierno de la Provincia Shaanxi de la República Popular China, un Memorando de Entendimiento sobre el apoyo a Shaanxi Coal Industry Chemical Group Co., Ltd. para llevar a cabo proyectos de energía e industrias químicas en Tierra del Fuego. pic.twitter.com/OH00nMt7dh
— Gustavo Melella (@gustavomelella) August 16, 2022
En redes sociales, Melella aseguró que “estamos iniciando un camino serio de inversión, de producción, de exportación y de sustitución de importaciones, por eso esta es una gran noticia para la provincia y para la Argentina, porque tiene que ver con el desarrollo y la generación de empleo”.
La realidad es que, más allá de la compleja situación cambiaria y económica presente en la Argentina –factores clave que en los hechos hace inviable la realización de grandes inversiones–, el proyecto cuenta con algunos interrogantes.
Por lo general, las inversiones en fábricas de fertilizantes nitrogenados se hacen en la cercanía de regiones agrícolas (para reducir costos logísticos en lo que respecta a la demanda interna), además de ubicarse en las inmediaciones de terminales portuarias exportadoras (como es el caso de Profertil en Bahía Blanca). En Tierra del Fuego no se presentan ninguna de las dos condiciones.
