Este martes el gobierno puso en marcha la Comisión Nacional Asesora de Biomateriales (COBIOMAT), que será coordinada por la Secretaría de Agroindustria. Había sido creada por resolución en abril pasado y su deber será “trabajar para promover la producción y consumo de biomateriales generados a partir de materias primas agroindustriales”. Por ejemplo, bioplásticos a partir de almidón de maíz o detergentes a partir del aceite de soja.
“Los biomateriales son productos que se están empezando a usar a nivel mundial,para reducir el uso de materiales derivados de recursos no renovables, especialmente del petróleo. Se pueden fabricar a partir de materia prima agroindustrial”, explicó Martín Lema, director del área biotecnología de la degradada secretaría de Agroindustria y uno de los coordinadores de la nueva comisión de biomateriales.
El funcionario explicó que “en la Argentina hay varios emprendimientos arrancando, y muchos de ellos están absorbiendo tecnología extranjera, algunos de China, otros de Holanda. Es que acá la cadena se está armando recién ahora”.
Escuchá el reportaje completo con Martín Lema:
Lema contó que la función de la Comisión Asesora que se presentó esta semana será sugerir el camino a seguir para consolidar estos emprendimientos. “Lo que queremos es acompañar la formación de esa cadena con políticas que la fomenten y promuevan, y que los consumidores prefieran esos productos”, indicó.
Por eso, a la par de la COBIOMAT se presentó un sello denominado “Bioproducto Argentino”, cuya función será identificar los biomateriales que llegan a la góndola, para que la gente puede identificarlo más fácilmente.
“La comisión va a tener como función identificar esos productos y confirmar que cumplan con ciertas características”, explicó el director de Biotecnología. Por caso, se certificará que sean “biobasados” (basados en algún insumo biológico), biodegradables, sustentables e innovadores.
“Se establecen criterios y si se cumplen se otorgará la utilización del sello”, prometió Lema, para quien “esto ayudará a los consumidores, que tendrán una referencia gubernamental para guiarse para elegir esos productos”.
En el Minagri crearon un programa de fomento a la bioeconomía
El funcionario aceptó que por el momento los biomateriales que llegan del exterior son escasos y que son todavía hasta cuatro veces más caros que el mismo material hecho a partir de petróleo. “Eso tiene que ver con falta de volumen, pues hay poca demanda y producción. Cuando se gane escala deberían bajar los precios”, evaluó.
Según Lema, la Argentina tiene todas las condiciones para crecer también en este nuevo rubro del agronegocio, ya que “los insumos nos sobran y en como ventaja competitiva tenemos, en términos de recursos humanos, muchos profesionales formados para desarrollar esta tecnología”.
¿Y qué es lo que se puede hacer? Lema contesta que de todo un poco, dependiendo las materias primas disponibles. Lo más conocido es el bioplástico fabricado a partir de almidón de maíz, de papa o de mandioca. Pero también se puede hacer biodetergente a partir de aceite de soja, cambiar las fibras de vidrio por fibras vegetales, extraer la lignina de la madera como sustituto del cemento, o utilizar las levaduras que sobran de la producción de cerveza para hacer envoltorios o film para preservar los alimentos.