Tras un período de inactividad, el mercado argentino de urea comenzó a reactivarse de la mano de la mejora de los precios de los granos –especialmente la soja– promovida por la rebaja de derechos de exportación.
En los últimos días aparecieron órdenes de compra de urea granulada, tanto para refertilizar trigo y cebada –con despacho inmediato– como para programar la campaña de maíz 2025/26.
“Si bien los precios de la urea en el mercado argentino aún no alcanzan los niveles de reposición, se acercan considerablemente, con un mercado que ya asume que los valores vigentes son altos y podrían sostenerse”, señala el último informe de la consultora IF Ingeniería en Fertilizantes.
“En paralelo, se observó un repunte en la demanda de fertilizantes líquidos, que actualmente presentan una muy buena relación de precio respecto a los sólidos, favoreciendo su adopción”, añade.
Otro de los factores que incentivaron compras, especialmente provenientes de empresas ganaderas y lecheras, es la creciente incertidumbre cambiaria, dado que si el valor del dólar sigue subiendo es probable que ni la hacienda ni la leche copien esa dinámica.
“En cuanto al fósforo, la semana también mostró mayor dinamismo, con una demanda enfocada en productos de menor concentración de pentóxido de fósforo, como mezclas, SPS y NPS, incluso algunas con zinc”, remarca el informe.
“Esta tendencia responde a la búsqueda de soluciones más económicas por unidad de nutriente. Sin embargo, los precios locales del fosfato monoamónico (MAP) y diamónico (DAP) siguen por debajo del costo de reposición, lo que anticipa posibles subas en el corto plazo”, alerta.
En ese marco, la consultora IF Ingeniería en Fertilizantes recomienda no dormirse al momento de realizar compras de fosfatados, ya que los precios internos, debido a la baja demanda, siguen sin reflejar los valores de paridad de importación.