En los primeros once meses de 2022 las empresas agroindustriales argentinas liquidaron la suma de 36.761 millones dólares, una cifra 21,9% superior a la registrada en el mismo período de 2021.
La cifra, si bien está expresada en dólares nominales, es muy elevada incluso considerando el valor real ajustado por inflación en función de la depreciación del dólar estadounidense.
En ese sentido, un valor de 36.761 millones de dólares en 2022 es equivalente, ajustado por la inflación minorista estadounidense, a 28.796 millones de dólares de 2012.
La cuestión es que una década atrás, en 2012, el ingreso de agrodivisas realizado por el sector agroindustrial argentino había sido de 21.531 millones de dólares, lo que implica un crecimiento real en el período del 33%.
En lo que respecta a las agrodivisas ingresadas en noviembre pasado, sumaron 1696 millones de dólares, una cifra 17% menor a la registrada en el mismo mes de 2021, algo esperable luego del adelanto extraordinario de 8120 millones registrado en el mes de septiembre en el marco del régimen cambiario especial denominado “dólar soja”.
Con la segunda edición del “dólar soja”, vigente en el presente mes de diciembre, se prevé que el año 2022 cierre con un ingreso récord absoluto de agrodivisas.
En términos estructurales, la mayor parte del fenómeno se explica por los elevados precios internacionales de los commodities agrícolas, dado que, considerando tanto cereales como productos del complejo oleaginoso, las cantidades exportadas decrecieron respecto del año anterior debido al impacto de inconvenientes climáticos y ausencia de incentivos económicos para incrementar la producción.