“Quizás mis posiciones están avanzadas en el tiempo”, dijo este viernes Fernando Vilella, el despedido secretario de Bioeconomía del gobierno de Javier Milei, como para justificar la decisión del Presidente de reemplazarlo por Javier Iraeta y retrotraer el nombre de esa cartera a la más tradicional Agricultura, Ganadería y Pesca.
En declaraciones a varias radios, Vilella además dijo que su visión sobre la bioeconomía era apoyada por la inmensa mayoría del sector productivo. “En las últimas 48 horas he recibido 300 mensajes de apoyo de casi todas las entidades de productores, que no entienden que es lo que pasó. Pero no es mi decisión. Habrá que preguntarle a quien tomó la decisión”.
En publico, en rigor, no hubo manifestaciones de ningún sector contrarias a este reemplazo y mucho menos desde las entidades que conforman la Mesa de Enlace.
Vilella todavía es secretario de Bioeconomía, porque todavía no se publicó la resolución del Ministerio de Economía que lo reemplaza por Sergio Iraeta, y que además volverá a la denominación histórica de esa cartera: Agricultura, Ganadería y Pesca. De todos modos, el hombre designado allí por el ministro Luis Caputo y su secretario coordinador Juan Pazo, ya estaba trabajando. Esta mañana analizaba con su equipo una serie de medidas de apoyo a los productores afectados por las nevadas en Santa Cruz.
La nueva gestión además ya quitó de la página web oficial un link con el informe de gestión de los primeros 90 días de Villela en el cargo, que además prometía extender ese balance a 180 días. Esa ampliación jamás se publicó. Así es el gobierno parece: no habrá espacio para una autocrítica o revisión de los realizado hasta ahora.
En una entrevista concedida temprano a Radio Mitre, donde el ex decano de la Fauba hacía columnas sobre economía antes de convertirse en funcionario, consideró que su despido del gobierno -que no desmintió- representaba una “involución” en las promesas de campaña del presidente Milei. Este es el reportaje:
“Mi horizonte siempre fue el bien común, todo el mundo lo tiene claro. Sostuve distintas posiciones en el Estado, nunca tuve crecimiento patrimonial y por lo tanto estay muy tranquilo. Quizás mis ideas están anticipadas en el tiempo”, deslizó no sin cierto tono de soberbia el funcionario saliente, insinuando que las que ganaron con esta puja en el gobierno fueron sectores intelectualmente más precarios.
-¿Lo echaron del gobierno?
-Bueno, el gobierno consideró que la bioeconomía no era el formato que había elegido en su momento el presidente Milei. En estos días han salido distintos tipos de informaciones erradas (que dan cuenta que recién conoció al Presidente en marzo, en la Expoagro). Yo conozco al presidente Milei hace un año, cuando en una reunión de productores de alto nivel de la Argentina pide un proyecto y pide gente para trabajar. Yo represento a esos productores para cubrir ese rol y generé la plataforma agropecuaria que votó el 56% de los argentinos.
Vilella acotó que esa plataforma contenía varias medidas que fueron a contramano de lo que finalmente aplicó Milei, incluso desde la Ley Bases, como la modernización del sector de la carne, una nueva ley de biocombustibles e incluso la tan discutida quita de retenciones. Justificó esos renuncios en “una macroeconomía tan compleja como la que recibió”.
Se notó cierta tristeza en el tono del funcionario cuando lamentó que desde Economía ni siquiera le hayan dejado anunciar los avances en diferentes gestiones sanitarias y comerciales que mantuvo en su última gira como funcionario, por China, Corea y Japón. El gobierno, en rigor, ya tenía tomada la decisión de despedir a Vilella desde horas antes de que suba al avión, por lo que decidió primero demorar el anuncio. Luego no esperó, a su regreso, para hacer el enroque. Juan Pazo lo llamó cuando estaba haciendo escala en el aeropuerto de París.
“Yo estaba abriendo mercados. Conseguí la reapertura en los próximos días para la carne aviar a China, la entrada de las menudencias argentinas, que acaban de ser aprobadas, la apertura del mercado coreano para los productos aviares. Presenté una queja muy fuerte en la OMC contra Japón por no permitir el ingreso de la carne argentina. Estas son las cosas que voy a seguir haciendo”, prometió. No se sabe desde dónde.
Todas estos resultados no han sido comunicados oficialmente todavía por las autoridades de Economía o el Senasa.
“Algunos entendieron a partir de una mala lectura del mundo o de mala información, que había que retroceder conceptualmente y volver a una Secretaría de Agricultura, que es solo una parte importante del futuro. Eso es disminuir las capacidades que tiene Argentina de ingresar al mundo con productos de más valor y con una formulación que es la que los consumidores prefieren”, insistió Vilella, incomprendido.
Y luego se despidió: “Tengo un informe del trabajo hecho en 180 días, dentro de los límites que en este momento impone la macroeconomía, creo que hemos avanzado, hemos generado proyectos que estaba esperando que salga la Ley de Bases”, explicó.
Al parecer no conoceremos ni el balance de su corta gestión ni aplicará muchos de esos proyectos en carpeta, como la rebaja de retenciones. La política es muy cruel con quienes están conceptualmente demasiado evolucionados.