El Decreto 1035/2020, publicado este lunes en el Boletín Oficial con la firma del presidente Alberto Fernández, otorgó la distinción “Investigador/a de la Nación Argentina” al doctor Fernando Héctor Andrade. Se trata de un reconocido especialista en Ecofisiología de Cultivos del INTA Balcarce, que ha hecho muchos aportes en materia de cultivos extensivos, en especial al maíz.
Tan alta distinción a Andrade, aunque oficializada recién hoy, se conoció la semana pasada, en un acto que contó con la participación de Alberto y otras autoridades nacionales.
Creada en una vieja ley 25.467 que recién fue reglamentada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología este año, la distinción se entrega a la persona más sobresaliente del sistema científico nacional. Para la selección, el jurado toma en cuenta que dicho científico haya “producido nuevos conocimientos y desarrollado innovaciones de impacto social y productivo, además de promover la transferencia de conocimiento y la formación de recursos humanos”.
Este último rasgo, transferir los conocimientos a nuevas generaciones de investigadores, parece ser uno de los rasgos más salientes de Andrade. Si hasta sus propios alumnos en el posgrado de la Unidad Integrada Balcarce (INTA Balcarce – Facultad de Ciencias Agrarias de Mar del Plata) le hicieron un homenaje tanto o más emotivo que el que recibió del Presidente de la Nación:
Andrade es un distinguido investigador del INTA, del CONICET y profesor titular de Ecofisiología de Cultivos de la Universidad Nacional de Mar del Plata. Se graduó de Ingeniero Agrónomo en 1980 en la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y posteriormente realizó estudios de Magister Scientiae y PhD en la Iowa State University, Estados Unidos.
Andrade dedicó su vida a generar conciencia acerca de la necesidad de romper la asociación entre producción y degradación ambiental, de manera tal de diseñar agroecosistemas que permitan satisfacer las futuras demandas de productos agrícolas sin comprometer el recurso suelo.
Sin dejar nunca de advertir la enorme riqueza económica y social promovida por el desarrollo del sector agrícola, se dedicó a estudiar los efectos de dicha actividad sobre el ambiente, en especial en lo que respecta a la degradación de los suelos, la contaminación ambiental por agroquímicos y la pérdida de biodiversidad y de servicios ecosistémicos.
A partir de tales investigaciones, promovió la realización de prácticas orientadas a cuidar al ambiente –tales como la intensificación agrícola–, siempre con una base científica y evitando posturas extremas. Buena parte de su visión al respecto la plasmó en el libro “Los desafíos de la agricultura argentina” (2018), editado por INTA.
Cuenta con un h-index de 50 en la plataforma Scopus, el cual mide el aporte científico realizado por investigadores de todo el mundo, a partir de la publicación de 117 trabajos científicos validados que a la fecha fueron citados en más de 6000 oportunidades en otros artículos científicos.
Fernando nació en Buenos Aires el 28 de junio de 1956. Es Investigador de INTA desde 1985, además de investigador principal de CONICET, profesor titular de la mencionada cátedra de Ecofisiología de Cultivos y coordinador nacional del Área Estratégica Ecofisiología Vegetal del INTA.
Participó de la publicación en 2017 de un destacado libro llamado “Los desafíos de la agricultura argentina. Satisfacer las futuras demandas y reducir el impacto ambiental”. Puede ser descargado gratuitamente aquí mismo:
A su vez, tiene otro libro a punto de publicarse, que se llamará “Los desafíos de la agricultura global para las próximas tres décadas”.
Dice una gacetilla del INTA que el trabajo de Andrade se focaliza en generar conciencia acerca de la necesidad de romper la asociación entre producción y degradación ambiental, planificando los agroecosistemas de manera tal de satisfacer las futuras demandas de productos de la agricultura y reducir paralelamente el impacto ambiental de la actividad, asegurando la provisión de servicios ecosistémicos y beneficios socioeconómicos esenciales para la sociedad.
Susana Mirassou, la presidenta del INTA, también felicitó a Andrade por la distinción recibida y aseguró sentir un “enorme orgullo” por el galardón y su aporte al impulso de mejores prácticas de manejo del cultivo extensivo en la Argentina. “Este premio es el máximo reconocimiento que un investigador puede recibir, ya que se destaca a la persona más sobresaliente del sistema científico nacional”, señaló.