“Designase, a partir del 11 de diciembre de 2023, en el cargo de Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ministerio de Economía, al ingeniero agrónomo Fernando Vilella”, dice el Decreto 49/2023, firmado por el presidente Javier Milei y publicado en el Boletín Oficial de este lunes.
Si estuviéramos transitando los días en que el relato oficial era escrito por kirchneristas, la historia sería que el nuevo presidente libertario vulneró los sentimientos más íntimos de Vilella, que se autopercibía (y se presentaba) como secretario de Bioeconomía, pero que finalmente será un vulgar y corriente Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca.
¡Llegó el álbum de Biofiguritas! ¿Quién es quién en la nueva Secretaria de Bioeconomía?
Pero estamos en días en que el pragmatismo domina la escena política: Milei está debutando en la Casa Rosada con múltiples problemas y conflictos por resolver y por ahora prefiere llamar a las cosas por su nombre, dejando de lado aspiraciones que poco aportan y no hacen al contenido de las cosas. Además para cubrir el cargo de “secretario de Bioeconomía” primero habría que crear una secretaría con ese nombre, cosa que no sucedió. Por ahora el Estado sigue siendo el mismo que era en tiempos de los kirchneristas. Existe un Ministerio de Economía y de el dependen varias secretarías, entre ellas la de Agricultura, Ganadería y Pesca.
Al menos por ahora, entonces, Vilella ocupará esa cartera tradicional y no otra cosa por definir. Posiblemente ese área se convierta en Bioecomía -como él la autopercibe- cuando se conozca el nuevo mapa del Estado, que incluye definiciones un poco más importantes que el nombre, como la cantidad de subsecretarios y directores nacionales que quedarán en cada sector de la administración pública. Una nueva estructura estatal mínima es algo que Milei viene anunciando se achirará visiblemente como parte de la ofensiva contra la “casta política”. Pero sobre esto, por ahora no ha firmado más que un decreto que redujo de 18 a 9 la cantidad de Ministerios.
En esta estructura todavía pendiente, Vilella podrá haber soñado ser el primer Secretario de Bioeconomía de la historia, e incluso así lo anunció a los medios de prensa. Pero su nombramiento no podía esperar por esas exquisiteces. Sobre todo porque Economía ya lanzó un fuerte ajuste y hasta anunció una suba de las retenciones al agro, pero no había cubierto formalmente el casillero de quien debería negociar con las entidades del campo.
Antes de mostrar que se autopercibía con otro nombre en su cargo, Vilella ya llevaba muchos años de docente de la Facultad de Agronomía contando que la “bioeconomía” no es lo mismo que la producción agropecuaria tradicional, pues incorpora como un segundo piso de análisis a la producción, con conceptos tales como la economía circular, el valor agregado y la sustentabilidad de los procesos productivos. También validando el concepto de que la agricultura puede servir para producir energía y no solo alimentos.
Pero por ahora esa evolución no sucedió. Y como secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca formalizado, Vilella se verá las caras nuevamente este lunes con los dirigentes del agro, a los que prometió analizar caso por caso el grado de daño de las nuevas retenciones del 15% anunciadas por Caputo para todos los rubros de la economía.