Los precios de los aceites vegetales siguen acumulando factores alcistas tanto en el ámbito del propio mercado agroindustrial como del energético.
Los problemas climáticos, junto con la dificultad para conseguir trabajadores debido a las restricciones logísticas implementadas durante la pandemia, viene restringiendo desde el año pasado la capacidad de producción de aceite de palma tanto en Indonesia como Malasia.
Si bien históricamente el aceite de palma se comercializó con un descuento respecto del de soja, desde fines del año pasado ambos cotizan prácticamente a la par a causa de una demanda internacional por demás firme en un escenario de oferta limitada.
En ese contexto, a partir del próximo 24 de enero el Ministerio de Agricultura de Indonesia dispuso que los exportadores de aceite de palma deberán gestionar permisos para poder concretar embarques. La medida –según indicó hoy la agencia Reuters– se instrumentó con el propósito de morigerar los valores del producto en el mercado interno de la nación asiática.
Ambos aceites –de palma y de soja– se emplean en muchas naciones como insumo base de la elaboración de biodiésel, razón por la cual suelen copiar las cotizaciones internacionales del petróleo crudo, que viene subiendo en las últimas semanas tanto por razones de demanda como por conflictos geopolíticos que amenazan la disponibilidad de oferta.
Además del crecientes tensiones existentes entre Rusia y Ucrania, un atentado realizado ayer por guerrilleros de Yemen contra instalaciones hidrocarburíferas localizadas en Emiratos Árabes Unidos agrega una cuota adicional de incertidumbre en un mercado ya de por sí subofertado.
Por si faltaba algo más, el recorte de oferta de soja que se producirá en la campaña 2021/22, producto de la sequía que golpeó a la producción agrícola sudamericana, contribuirá a recortar la disponibilidad de aceite de soja en el transcurso del presente año.
De hecho, mientras que hoy martes las cotizaciones del poroto de soja en el mercado estadounidense CME Group cayeron, no sucedió lo mismo con los precios del futuros de aceite de soja, que finalizaron con importantes subas intradiarias.