“Necesitamos no solo que se mantenga el esquema de baja de retenciones, sino que se eliminen”, sostuvo este jueves a la mañana el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, tratando de torcer hasta último momento la decisión que debe tomar este fin de semana el gobierno de Javier Milei, respecto de mantener o no la rebaja temporal de ese tributo agrícola, que tiene fecha de vencimiento el 30 de junio.
Pullaro consideró “un error” que el Gobierno nacional no prorrogue el decreto que desde principios de año redujo de manera transitoria los Derechos de Exportación (DEX) de productos agropecuarios y, en consecuencia, desde el próximo 1 de junio regrese el esquema anterior de retenciones para el sector, llevando nuevamente al 33% las retenciones a la soja.
“Es no mirar al interior productivo de la República Argentina. Todo lo que se genera en el campo debe quedar en los pueblos y en las ciudades del campo fundamentalmente. Los gringos, los trabajadores, no se llevan la plata al exterior, no la ponen en cuentas offshore, no la ponen en criptomonedas”, definió el santafesino.
Según este posición, los productores “invierten absolutamente todo lo que ganan en tecnología para poder producir más, o en poner en ladrillos en las ciudades, con lo cual estoy convencido que si esta política no cambia, si no se eliminan las retenciones o si no se prorroga la medida vigente, realmente el gobierno nacional se va a equivocar y va a cometer un gravísimo error”.
Pullaro fue más allá y sostuvo: “Necesitamos no solo que se mantenga el esquema de baja de retenciones, sino que se eliminen las retenciones, pero también que tengamos una política en donde nosotros cuidemos a la industria. La apertura de nuestro país tiene que ser estratégica e inteligente, pero siempre cuidando los puestos de trabajo”.
En el mismo sentido, el ministro de Desarrollo Productivo de la provincia, Gustavo Puccini, calculó: “Si más allá del 30 de junio, vuelven las retenciones sobre todo a la soja como eran hasta enero, los productores santafesinos van a perder 227 millones de dólares, considerando el volumen pendiente de comercialización de la campaña 2024/2025, plata que se va y no vuelve ni en arreglo de rutas nacionales, ni en terceros carriles de autopistas ni en grandes obras logísticas o de infraestructura energética”.
El ministro fue contundente a la hora de hablar de números respecto del aporte que hicieron desde el campo santafesino al Estado Nacional: “Un dato: durante 2024, los productores agropecuarios santafesinos transfirieron más de 2.000 millones de dólares al Estado nacional en términos de retenciones, un impuesto que no es coparticipable y que no generó ningún beneficio para nuestro entramado productivo, ya que no volvió en obras ni quedó en manos de los propios productores”.
“Si vuelven las retenciones al esquema anterior, donde el poroto de soja tenía un 33 %, y la harina y el aceite pasa de nuevo al 31 %, se va a reducir significativamente la capacidad de pago de la industria y la exportación, con un lógico impacto en los precios del mercado”, añadió.