En julio pasado el gobierno nacional eliminó la obligatoriedad de registrar Declaraciones Juradas de Venta al Exterior (DJVE) de especialidades agroindustriales y legumbres para quitar carga burocrática a las empresas exportadoras.
Entre los productos comprendidos por la medida (la mayoría se comercializa por contenedor) se encuentran legumbres (arvejas verdes y amarillas, garbanzos, porotos blancos, negros y colorados, y lentejas), arroz (cáscara, descascarillado, semiblanqueado o blanqueado y partido) maní (confitería, partido y los demás), maíz pisingallo, aceite de maíz y afrechillo de trigo.
Sin embargo, antes de la implementación de esa medida, muchos exportadores ya habían solicitado la DVJE y, por lo tanto, deben cumplir con el régimen anterior, respetando el plazo de embarque correspondiente, para evitar quedar en infracción.
La cuestión es que, debido a los problemas generados por la pandemia y los conflictos geopolíticos que vivieron después, la disponibilidad de buques de carga de contenedores se redujo de manera dramática (problema que se agravó en la Argentina por los problemas para afrontar pagos por restricciones cambiarias).
En ese marco, la Secretaría de Agricultura dispuso este martes una prórroga automática excepcional de 120 días corridos, los que se deberán comenzar a contar a partir de la fecha de vencimiento del período de embarque más la prórroga automática, a las DJVE registradas y vigentes que involucren a productos que no se exporten a granel (bolsas, bultos, etcétera) o que se envíen en contenedores.
En los fundamentos de la norma se explica que la Cámara de Exportadores (CERA) el pasado 24 de septiembre realizó una presentación en la que señala la grave situación del transporte marítimo internacional, en la cual formuló su preocupación en relación al “fuerte aumento de tarifas de fletes y la falta de espacio en las principales rutas mundiales, lo cual no resulta ajeno al comercio exportador argentino, por cuanto viene generándole gran incertidumbre respecto a la posibilidad de concretar sus embarques en virtud de la escasez de espacios en bodega y la drástica disminución de la disponibilidad de contenedores vacíos, conjuntamente con la constante interrupción de los itinerarios previstos y la cancelación reiterada de arribos de buques a los diversos puertos de nuestro país”.
También se indica que en “el contexto actual y desde hace unos meses a esta parte, la gran cantidad de omisiones de barcos y de numerosos roleos de cargas de exportación, tanto en el Puerto de Buenos Aires (Puerto Nuevo + Exolgan) como en las Terminales Zárate y Puerto Rosario, no parece presentar alternativas de mejora en el corto plazo”.
Frente a ese escenario, para que no se vea afectada la operatoria vinculada con el mercado exterior, se consideró necesario otorgar la prórroga a las DJVE de legumbres y especialidades.