El gobierno nacional pretende reemplazar el actual régimen de promoción de biocombustibles –que vence en mayor próximo– por otro que reduce sustancialmente el aporte de biodiésel y bioetanol a la matriz energética argentina.
El bloque legislativo oficialista pretende reducir el corte de bioetanol con nafta del actual 12% al 6,0% por medio de la eliminación de la obligatoriedad de corte del bioetanol elaborado con maíz, mientras que se mantendría el aporte del biocombustible producido en base a caña de azúcar.
“Los diferentes mercados de la caña de azúcar con los del maíz y la soja no son las mismas realidades”, aseguró hoy el secretario de Energía, el neuquino Darío Martínez, durante una exposición realizada en una reunión virtual de la Comisión de Energía y Combustibles de la Cámara de Diputados. “El corte de bioetanol de caña de azúcar debe estar totalmente contenido en el nuevo régimen”, remarcó el secretario.
En ese sentido, señaló que el proyecto oficialista –que aún no se hizo público formalmente– tendrá especial consideración al bioetanol elaborado con caña de azúcar porque el consumo de azúcar viene cayendo en los últimos años y, ante esa circunstancia, el sector requiere ser apoyado.
En cuanto al corte del 10% de biodiésel con gasoil, la intención oficial también contempla reducir esa proporción a la mitad, aunque Martínez aseguró que el nuevo régimen pondrá el foco en defender los puestos de trabajo de “las Pymes, las empresas no integradas y aquellas que no tienen capacidad financiera”.
“Este régimen tiene que distinguir las empresa integradas de los grandes grupos económicos de aquellos sectores que no tienen capacidad de financiarse para sostenerse”, sostuvo el funcionario.
Por su parte, los integrantes del sector solicitaron a los diputados que extiendan el actual régimen por al menos un año más para poder elaborar una nueva legislación consensuada.
En el ámbito del gobierno nacional no existe prácticamente nadie con interés en defender a la industria de los biocombustibles, aunque la misma es indispensable para cumplir con los estándares del “Acuerdo de París”, especialmente luego de que en diciembre de 2020 el presidente Alberto Fernández anunciara que la meta para 2030 fue fijada en 360 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente (MtCO2eq), cuando la meta anterior era mucho menos ambiciosa (483 millones de toneladas).
El secretario de Energía Martínez tiene el foco puesto en el desarrollo de la industria petrolera, mientras que el equipo económico liderado por Martín Guzmán está buscando diferentes alternativas para favorecer la posición de una YPF endeudada en dólares más allá de su capacidad de pago.
El tema, sin embargo, es prioritario para las provincias de Córdoba y Santa Fe, las cuales, si bien están gobernadas por peronistas, –Juan Schiaretti y Omar Perotti– no están dispuestos a asumir el costo político de ver el desastre económico y social generado por una eventual destrucción de la industria del biodiesel y el bioetanol.
Por parte del sector privado expusieron Luis Zubizarreta (Carbio), Patrick Adam (Cámara de Etanol de Maíz), Juan Carlos Bojanich. (Cepreb), José Vicente Porta (Cámara de Industrializadores de Granos y Productores de Biocombustibles de Origen), Jorge Feijoó (Centro Azucarero Argentino), Hilarion del Olmo (Cámara Panamericana de Biocombustible), Tomás Lorda (Cámaras de Empresas Pymes Regionales)
“Hablar de biocombustibles es hablar de tecnología argentina y de transformar el maíz, porque sino vamos a terminar siendo primarizadores de la economía rural”, afirmó Porta, propietario de la empresa homónima que desarrolló el sistema Minidest para elaborar, por medio de plantas modulares, bioetanol y burlanda de maíz en los establecimientos agropecuarios.
En tanto, Jorge Feijoó, presidente del Centro Azucarero Argentino, aclaró que “los biocombustibles no reciben subsidios y no dejan de pagar ningún impuesto”, al tiempo que Tomás Lorda declaró que “nuestras empresas (las Pymes elaboradoras de biodiésel) no nacieron para competir porque trabajan en mercados imperfectos en los cuales nuestro cliente y proveedores están absolutamente concentrados”.