El presidente Javier Milei decía en su campaña electoral que las retenciones o Derechos de Exportación (DEX) eran un gran robo del estado hacia los productores agropecuarios. Pero cuando llegó al poder, en diciembre pasado, no volvió a referirse al asunto y hasta amagó subir ese tributo en la discusión de la primera versión de la Ley Bases.
Esta situación llama la atención de muchos productores agropecuarios, algunos más ansiosos que otros, que todavía confían en el Presidente y le otorgan mayor plazo de tiempo para cumplir con sus promesas de campaña.
Lo cierto es que la tentación de no remover los DEX es, una vez que cualquiera se apodera de los resortes del gobierno, demasiado elevado. Y más ahora, en tiempos de crisis y cuando uno de los objetivos principales del gobierno es lograr un equilibrio fiscal, para evitar la emisión monetaria sin respaldo y así sofrenar un poco la inflación.
A esta tentación la puso en números un estudio de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), que remarcó que entre enero y marzo de 2024 el agro aportó un estimado de 1.466 millones de dólares en retenciones, lo que significó un 570% más que en igual período del 2023. Es decir, la recaudación por retenciones agrícolas (sobre todo desde el complejo soja) se multiplicó por cinco en lo que va del gobierno de Milei. Difícil pensar en quitarlas con semejante envión.
La BCR hace la salvedad que semejante salto de la recaudación se produjo comparando contra un año donde la sequía había hecho estragos en la producción y las exportaciones de granos. En los primeros tres meses del 2023, las retenciones agrícolas habían sumado un estimado de apenas 220 millones de dólares. De allí semejante recuperación.
Además muchos embarques de principios de 2023 se habían adelantado unos meses, motorizados por el Dólar Soja que había impuesto el ex ministro Sergio Massa en septiembre de 2022.
Por eso no es para descorchar el resultado actual ni mucho menos. “La notoria recuperación interanual, si se compara con los años anteriores este guarismo se encuentra por debajo de los más de 2.000 millones de dólares que se habían recaudado por esta vía en los primeros tres meses de 2021 y 2022”, se aclaró desde la Bolsa de Rosario.
Lo interesante, en este contexto de crisis actual, es ver cómo sigue la película para lo que resta de 2023, para determinar si será posible que el gobierno de Milei se defina a cumplir con su promesa. Allí la BCR proyecta “que el total de aporte por DEX de los principales complejos del agro alcance 6.708 millones de dólares, más del doble de lo aportado en 2023 pero considerablemente por debajo de los guarismos del 2021 y 2022”.
En este resultado tendrá mucho que ver la caída en el ingreso de divisas totales (las retenciones se llevan 33% de eso en el caso de la soja y 12% para el resto de los granos), que se producirá por el fuerte descenso de los precios internacionales de los granos, que supera 20% en lo que va del año.
“Por la caída de los precios internacionales de los primeros meses del año, la estimación de aporte de DEX del agro cayó más de 600 millones de dólares versus lo que se proyectaba en enero de este año”, reconoció el informe.