Si la gente común oye hablar de Pergamino, el partido ubicado a unos 200 kilómetros al norte de la ciudad de Buenos Aires, yendo por la Ruta 8, de inmediato pensará en altas rentabilidades porque “son las mejores tierras de la Argentina”.
Eso puede llegar a suceder en un año normal, pero esa zona ha sido particularmente castigada por la gran sequía de estos últimos años. A punto tal que la Sociedad Rural de Pergamino acaba de calcular que solamente allí los productores sufrirán una pérdida de 190 millones de dólares, equivalente a 3,5 veces el presupuesto municipal de todo un año.
El cálculo lo hizo Jorge Josifovich, presidente de la institución. Y contempla tanto el dinero perdido por la cosecha de granos finos y cultivos de invierno, en especial el trigo pero también la arveja, que ya sucedió; y una estimación de las probables pérdidas por granos grueso, con la soja y el maíz a la cabeza. En este caso, se compararon los rindes promedio obtenidos la campaña pasada contra los rindes potenciales calculados al 15 de enero, en pleno fragor de la sequía. Estos son los resultados:
En los cálculos del presidente de la Rural de Pergamino, si esta campaña 2022/23 hubiera llovido más o menos normal y se hubieran repetido los escenarios productivos del ciclo anterior, que por cierto no fueron los mejores de la región, al sector agrícola hubiera inyectado al Partido un total de 409 millones de dólares. Pero como la falta de lluvias está haciendo estragos, y los rendimientos cayeron a niveles bajísimos (de 2,4 toneladas para la soja y 5,5 toneladas para el maíz), el ingreso esperado será de solo 217 millones, prácticamente algo más de la mitad.
Esa cuenta es la que redondea una pérdida por sequía en Pergamino de nada menos que 192 millones de dólares. Esa es la suma que equivale a 3,5 veces el presupuesto anual de la Municipalidad de Pergamino.
Y todo esto descontando ya de los precios vigentes (que son los del mercado a término para el mes de cosecha de cada cultivo) el impacto de las retenciones a la exportación.