El arándano nacional parece seguir teniendo problemas para levantar la cabeza. A la caída sostenida en las exportaciones que el país registra desde hace varias campañas, se suma ahora un cierre de temporada con otra marcada caída en los envíos que solo fue compensada por buenos precios.
Así lo confirmó Jorge Pazos, secretario del Comité Argentino de Arándanos (ABC), al medio Portalfruticola.com, donde indicó que la campaña cerró con 6.400 toneladas exportadas de esa fruta, lo que supone una caída del 25% respecto de los envíos de la temporada anterior que rondaron las 8.500 toneladas.
Aún así, el titular del Comité destacó las cotizaciones recibidas durante estos meses. “Creo que buscar los equilibrios de sobre ofertar en los mercados, en el caso particular cuando Perú avanza con tantos volúmenes, lo que hace es que quienes son los compradores o intermedian en la compra, buscan regular un precio hacia la baja. Al haber menos volumen, permitió generar una ecuación de rentabilidad favorable para Argentina”, sostuvo.
En cuanto a las perspectivas futuras, Pazos reconoció que hay seguir trabajando para mejorar las variedades locales, con el objetivo de obtener mejores rendimientos, y que es importante invertir en genética.
“El horizonte de la industria es trabajar con nuevas variedades, ampliar nuestra superficie y lograr seguir explorando los mercados nichos, como el Sudeste Asiático, Medio Oriente, Israel, India y Brasil”, indicó.
De acuerdo con los últimos datos reportados por ABC, Gran Bretaña fue el mercado que registró el mayor crecimiento, con un alza de 1880%. Lo siguió Canadá con un 255%, Estados Unidos con un 114% y la UE con un 4%. Por el contrario, los mercados que presentaron una baja fueron China con un descenso del 35% y Asia en general con un 55%.