La soja Rosario MEP superó esta semana los 74.000 $/tonelada. Se trata del valor que recibirían los productores de soja si no existiese el “cepo cambiario” que opera como una “segunda retención”, dado que la “primera retención” es el derecho de exportación del 33% sobre el valor FOB.
Pero el precio de la soja Rosario disponible con “retención cambiaria” es de unos 36.000 $/tonelada. Eso porque mientras que el tipo de cambio oficial, es decir, intervenido por el gobierno nacional, se encuentra en 99,7 $/u$s (BNA comprador), el dólar MEP cotiza en torno a los 204 $/u$s.
Con esa brecha, la “retención cambiaria” supera ya el 50%, lo que implica que el Estado se queda con la mitad del valor de la soja o de cualquier otro bien exportable.
La contrapartida de ese fenómeno es una creciente “dolarización” del valor de los insumos y equipos empleados en el agro, dado que, ante las dificultades para acceder a divisas al tipo de cambio oficial para concretar importaciones –producto de las crecientes restricciones implementadas por el gobierno–, muchas empresas recurren a métodos alternativos para concretar el ingreso de productos.
Las autoridades monetarias argentinas vienen “pisando” el tipo de cambio oficial con el propósito de que esa acción opere como “ancla” contra el proceso de aceleración inflacionaria. Pero esa política, sostenida en el tiempo, termina generando efectos perniciosos de manera acumulativa, además de promover situaciones inequitativas entre quienes consiguen acceder a divisas al tipo de cambio oficial y quienes no tienen esa suerte.
El denominado “dólar bolsa” o “dólar MEP” se obtiene al comprar un bono argentino en pesos (AL30) que posteriormente es transformado en otro bono en dólares (AL30D). Se trata de una operación realizada dentro del mercado argentino.
Estado bulímico: En la Argentina la carga tributaria de la soja supera al costo de producción