Luego de la voltereta de las autoridades de la Secretaría de Agricultura, que el 5 de enero anunciaron que derogarían el troceo obligatorio de la media res y solo cinco días después se arrepintieron de su decisión para dar lugar a una nueva negociación con las Provincias, la Cámara de Matarifes (Camya) le escribió una carta al ministro Sergio Massa advirtiéndole que solo los grandes frigoríficos exportadores apoyan el cuarteo forzoso, y que de seguir adelante con esta política el gobierno estaría favoreciendo la formación de un oligopolio.
Bichos de Campo contó ayer que finalmente el gobierno desistió de drogar la Resolución Conjunta 4, que establecía que el próximo domingo 15 de enero será el último plazo para poder vender carne en forma de media res a las carnicerías, porque a partir de ese momento sería obligatorio el troceado en partes de no más de 32 kilos. A la vez, el lunes 16 habrá una nueva reunión, para decidir los pasos a seguir.
Claramente se puso en marcha un lobby en contra de esta decisión, que finalmente habilitaba la posibilidad de que las medias reses fueran movilizadas mediante medios mecánicos, para así proteger la salud de los trabajadores, el objetivo perseguido por estas regulaciones. El Consorcio ABC, que agrupa a las plantas exportadores de carne y había sido el mayor promotor del cuarteo, en las últimas semanas había aceptado a regañadientes la decisión oficial, pero a cambio esperaba una baja de las retenciones o la creación de un “dólar carne” que mejore la competitividad de sus negocios.
Como de medidas de ese estilo no hubo noticias, se especula que redoblaron la presión sobre el Presidente Alberto Fernández (quien prometió eliminar la media res en 2021) y por eso en Economía se vieron obligados a desandar en solo cinco días el camino de la derogación de esa exigencia.
Frente a este escenario, que terminaría de destrabarse el lunes supuestamente con una nueva prórroga de la exigencia del cuarteo (que habilitaría los medios mecánicos solo de manera provisoria y no definitiva), la Cámara de Matarifes expresó al ministro Massa “la preocupación” de todo el abastecimiento interno de carne por “las marchas y contramarchas producidas por la vigencia o derogación de la Resolución sobre cuarteo obligatorio de carnes, cuya anulación fue anunciada por la Secretaría de Agricultura luego de acordar con las provincias que su aplicación era inviable”.
La Camya, en la carta, recordó que “tiene un amplio consenso entre los operadores de la carne la propuesta de que se deje sin efecto la normativa 4/2021 y relacionadas, permitiendo la aplicación de medios mecánicos para la descarga de carnes en pesos superiores a los 32 kilos, tal como lo establece la normativa del Ministerio de trabajo, y que se convoque a una mesa técnica a todos los actores de la cadena de ganados y carnes”.
Luego de reafirmar que en las condiciones actuales la eliminación lisa y llana de la media res sería una medida inviable, los matarifes apuntaron que “la totalidad de la cadena de la carne, a excepción de un sector de los exportadores, se encuentra afectada por esta situación”.
Por eso ese sector le sugirió a Massa “realizar un relevamiento sobre el estado de las cadenas productivas, evitando que la imposición de una única modalidad tecnológica favorezca a los oligopolios”, así como “arbitrar los medios para que se aseguren el cumplimiento de las normas higiénicas sanitarias y laborales en la totalidad de los establecimientos”.