Mediante dos normativos, la Resolución 91/2025 y la Resolución 92/2025, publicadas en el Boletín Oficial, las autoridades de la Secretaría de Agricultura liberaron para la siembra dos variedades transgénicas de los maíces enanos o de baja estatura de la ex empresa Monsanto, que fue absorbida por Bayer en 2018. Esa empresa alemana ya anticipó que esas variedades estarían disponibles a partir de la campaña 2026/27.
El secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, por un lado estampó la firma para “la comercialización de la semilla, de los productos y subproductos derivados de ésta, provenientes del maíz con la acumulación de eventos MON-87427-7 x MON-948Ø4-4 x MON-ØØ6Ø3-6, la cual presenta baja estatura de la planta y tolerancia a glifosato”.
A renglón seguido, una segunda resolución autorizó “la comercialización de la semilla, de los productos y subproductos derivados de ésta, provenientes del maíz genéticamente modificado (GM) MON-948Ø4-4, con baja estatura, del maíz MON-95379-3, con protección contra ciertos insectos lepidópteros y del maíz con la acumulación de eventos MON-87427-7 x MON-948Ø4-4 x MON-95379-3 x SYNIR162-4 x MON-88Ø17-3, con baja estatura, con tolerancia a glifosato y que otorga protección contra ciertos insectos lepidópteros y coleópteros”.
En ambos casos, se trata de desarrollos nacidos de la cantera de la ex Monsanto, la empresa estadounidense que lanzó los primeros cultivos transgénicos en los años 90, y que fue absorbida por la alemana Bayer en 2018.
Ambos maíces (en realidad el segundo es la acumulación de eventos con múltiples resistencias) han pasado por el filtro de tres aprobaciones exigido por la legislación argentina en materia de biotecnología agrícola: la Conabia como organismo de referencia, el Senasa para evitar daños al ambiente y la propia Secretaría de Agricultura para evaluar el posible impacto comercial de las nuevas tecnologías.
En el congreso Maizar, que se realizó a fiens de mayo, Bayer informó que el desembarco de su nueva tecnología de maíces de baja estatura -a la que bautizó como Preceón- estará disponible en la Argentina a partir de la campaña agrícola 2026/27, aunque solo para un pequeño número de productores que ensayarán las posibilidades de adaptación en las diustintas zonas agrícolas del país.
Preceón es la marca comercial de lo que la compañía global llama “Sistema de Maíz Inteligente (Smart Corn System)”. Se trata de una nueva línea genética que está probándose hace bastante tiempo y que aporta “maíces de baja estatura (mayor protección, mejor tolerancia a vuelco y quebrado, mayor accesibilidad)”, pero que viene en combo con “recomendaciones agronómicas específicas por lote, así como servicios digitales que permiten a los productores gestionar mejor el riesgo y desbloquear el potencial de rendimiento del cultivo”.
La compañía agrícola cree que estas combinaciones entre transgénicos, nueva genética para reducir la altura de las plantas y agricultura de datos permitirá “quebrar” la tendencia de rendimientos de cultivos en el país. “Invertir en estas tecnologías permite cerrar la brecha entre el potencial lograble y lo que efectivamente se cosecha”, avisó Bayer, citando ensayos que dan cuenta que la brecha entre el rendimiento que el productor obtiene actualmente y lo que podría obtener con la tecnología disponible es del 34%.