El último dato oficial disponible, correspondiente al pasado 14 de agosto, muestra que los exportadores habían adquirido 2,59 millones de toneladas de trigo de la nueva cosecha 2024/25. Sin embargo, hasta el momento no registraron embarques de una sola tonelada de ese producto.
La razón detrás de ese fenómeno es que la mayor parte de las compañías agroexportadoras están priorizando las registraciones de operaciones con un plazo de embarque de 30 días (DJVE-30) por razones financieras.
La resolución 78 del Ministerio de Agricultura, vigente desde octubre de 2019, determina que los exportadores de productos agroindustriales están obligados a abonar al menos el 90% del derecho de exportación correspondiente dentro de los cinco días hábiles desde la registración de las Declaraciones Juradas de Ventas Externas (DJVE-360).
Las DJVE-360, como su nombre lo indica, permiten a las compañías, una vez registrada una exportación, contar con un plazo de embarque de un año a cambio de abonar por adelantado los derechos de exportación. Brinda, por lo tanto, mayor margen logístico.
Pero con la opción de las DJVE-30 el pago de los derechos de exportación se abona al momento de la oficialización de la exportación, lo que implica que la cancelación del tributo se difiere por algunas semanas más.
Es decir: el DJVE-30 representa una menor exigencia financiera para las compañías agroexportadoras, las cuales pueden diferir el ingreso de los créditos de prefinanciación de exportaciones al momento de originar mercadería o bien realizar una gestión financiera de los flujos de liquidez disponibles.
En ambos casos, DJVE-30 y 360, la base imponible se determina en base al precio FOB oficial –publicado diariamente por la Secretaría de Agricultura– vigente al momento de la registración de la exportación.
La priorización de la registración de DJVE-30 también permite abonar un menor derecho de exportación si el valor FOB del producto en cuestión desciende, en este caso, al momento de la cosecha del trigo a fines del presente año.
La misma situación registrada con el trigo también puede observarse en el caso de la cebada 2024/25 que comienza a cosecharse en el próximo mes de noviembre.