Esta que se anunció en Expoagro no es una inversión de una sola empresa, como nos tienen acostumbrados. Tampoco es una inversión para incrementar la capacidad de producción de determinado insumo o equipo.
En el marco de un encuentro en la Expoagro, la Fundación CampoLimpio, que agrupa a prácticamente todas las empresas que producen y venden agroquímicos en el país y que tiene como función primordial retirar los bidones plásticos del medio rural una vez utilizados, anunció una inversión de 3.600 millones de pesos a lo largo de 2024, destinada a ampliar el número de Centros de Almacenamiento Transitorio (CAT) en todo el país y a realizar jornadas de recepción de envases vacíos.
Esto le permitirá extender todavía más, casi un 50%, una red que ya permitió, desde su puesta en marcha en 2019, el recupero responsable de más de 12 millones de kilos de plástico desde el campo argentino
El plan apunta a habilitar más de 35 centros de almacenamiento para incrementar la cantidad de puntos de recepción de envases. Los CAT son galpones especialmente diseñados para recibir los bidones usados y limpios de agroquímicos, en algunos casos compactarlos, clasificarlos y comenzar con un proceso para el reciclaje de los mismos.
En Bichos de Campo ya hemos contado como funciona todo el sistema ideado por CampoLimpio para cumplir con una ley sancionada hace unos años, y que todas las empresas del sector decidieron encarar en conjunto.
En los anuncios se contó que además de los 35 CAT en zonas donde hasta ahora no llegaba el sistema, se asignarán unos 1.000 millones de pesos del presupuesto común a campañas de recepción de envases y concientización, que buscan profundizar un cambio de hábito entre los productores que aún no se adhirieron e incrementar los kilos de plástico recuperados.
“Es fundamental que los productores lleven el envase vacío de agroquímicos a su Centro de Almacenamiento Transitorio más cercano, evitando que este plástico contamine el ambiente y dañe la salud de las personas. CampoLimpio ya recuperó más de 12 millones de kilos de plástico impulsando una producción sustentable en todo el campo argentino”, manifestó la presidente de CampoLimpio, Mariale Álvarez.
Actualmente funcionan 80 CAT desplegados en distintos puntos del país a los que los productores pueden acercar sus envases. Los nuevos centros de acopio se construirán sobre todo en Santa Fe y Santiago del Estero, y en menor medida en Córdoba y Buenos Aires.
Según relatan los implementadores de este plan, ha sido muy trabajoso acordar el despliegue territorial de esta red con todas las provincias argentinas, que tienen la potestad de dictar sus legislaciones ambientales propias, por debajo de lo que marca esta ley nacional que obliga a la industria de agroquímicos a asegurar el retiro de los bidones de los campo.
Por esa razón hay algunas provincias que recién se están sumando y esto marca la necesidad de crecer casi 50% más en la cantidad de Centros de Acopio. Allí, luego de disponer de los envases para asegurar que no les queden restos de las sustancias químicas que contenían, se los envía a los centros habilitados para su chipeado, de modo que ese plástico pueda ser reutilizado para varios fines, como la fabricación de postes u otros elementos útiles para el propio sector.
En este entramado político, fue clave la presencia en el evento donde se hizo el anuncio, de varios funcionarios provinciales que le van dando mayor carnadura a este esfuerzo colectivo.
Luis Couyupetreau, subsecretario de Control y Fiscalización Ambiental de la Provincia de Buenos Aires, contó que “hace dos años que tenemos una mesa de gestión junto a CampoLimpio. Existe una ley basada en la responsabilidad extendida del productor y en la economía circular, hacemos un esfuerzo para también resaltar la salud pública. En la provincia queda plástico por recuperar, pero estamos dando pasos adelante en conjunto. Es muy importante contar con un sistema único de trazabilidad”.
La secretaria de Ambiente de Entre Ríos, Rosa Hoffman, agregó que en este desafío de retirar todo el plástico del campo, “la unión entre las áreas de Producción y Ambiente es clave para lograr un espacio intersectorial que sume a productores, a organizaciones y al sector público y que tenga a CampoLimpio como nexo. Mañana estamos inaugurando el octavo CAT en nuestra provincia con mucho orgullo”, contó.
Ignacio Mantaras, secretario de Agricultura y Ganadería de Santa Fe, una de las provincias más demoradas, manifestó que allí se “continúa trabajando en la reglamentación y capitalizando la experiencia de otras gestiones. Los ejes de nuestra Secretaría son el agua y el suelo y por este motivo queremos potenciar el sistema en pro de la economía circular para alcanzar mayor productividad, haciendo docencia en su adopción”.
Gustavo Balbi, director general de Fiscalización y Control del Ministerio de Bioagroindustria de Córdoba, afirmó: “Trabajamos juntos propositiva y normativamente. Los desafíos continúan de la mano de la trazabilidad”.
Desde el punto de vista de los productores, Marcela Fabrissin de Federación Agraria, advirtió sobre otro problema: la existencia de un circuito informal paralelo que perjudica todo este operativo. “Sabemos el esfuerzo de erradicar la compra ilegal y estamos comprometidos en articular cada vez más toda nuestra cadena de valor para seguir construyendo juntos las mejores prácticas para sensibilizar al productor”, indicó.
Por su parte, Patricia Luke de Coninagro, expresó que: “Debemos tomar conciencia del triple lavado y de la perforación a la hora de la entrega del envase. El campo debe ser un lugar sano para todos y eso es responsabilidad de quienes trabajamos en el”.