El secretario de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao, informó que desde 2012 hay científicos locales que trabajan con la nueva tecnología de la edición génica. “Estamos ante una tecnología diferente, dirigida y precisa. Y con la rapidez que antes con mutaciones por radiación o por químicos no se lograba. Con esta podemos cambiar una base por otra del gen que querramos y definir cuál actúa y cuál no (silenciar lo que no se desea)” en un ADN, explicó Barañao.
Aquí la entrevista completa con el Secretario de Ciencia y Tecnología de la Nación:
Barañao está seguro que los alimentos u productos que puedan obtenerse mediante la edición genética no serán en absoluto menos seguros que los obtentidos por otras técnicas o mejoramiento tradicional. “Caundo apareció la overja Dolly en 1996 (el primer animal clonado del mundo), todos imaginamos que iba a a parecer un ejército de clones humanos. Pero nada de eso sucedió. La realidad es que se ganó más plata escribiedno libros y películas sobre la clonación que con la propia clonación de animales”, ironizó.
Pero aclaró, de todos modos, que para controlar estos desarrollos “está la CONABIA -Comisión Nacional Asesora de Biotecnología Agropecuaria- en nuestro país, que trabaja en base a la evidencia científica y determina si algo puede lanzarse al mercado”. Hasta ahora, según el ex ministro, ese rol regulador no ha fallado con los transgénicos.
Ver: Santiago Del Solar sobre la edición génica: “La clave es que requiere menos regulaciones”
Barañao consideró que en el caso de los productos que puedan salir por edición génica todo el trámite desregulatorio será más rápido y ágil que con los transgénicos debido a que estos ‘cambios’ -mutaciones- en las especies podrían surgir incluso espontáneamente, tanto en vegetales como animales.
“Hasta la soja resistente a glifosato podría haber salido de forma natural, también. Mirá todas las malezas resistentes que hay”, razonó el repsonsable del sistema científico argentino. Es todo una cuestión de tiempo, pues sla edición génica acelera que aparezca la característica buscada. Que también podría no aparecer nunca. Es evolución.
Por último, Barañao destacó que mediante está técnica podrían generarse nuevas especies más amigables con el medio ambiente, al resistir a plagas y no necesitar la aplicación de químicos.