FEFAC, entidad con sede en Bruselas que agrupa a todas las asociaciones de elaboradores de alimentos balanceados de la Unión Europea, advirtió que el reglamento 1115 (“antideforestación”) provocará “una posible interrupción de la cadena de suministro debido a la baja disponibilidad de harina de soja compatible” con la nueva normativa y por “los mayores costos vinculados a la logística de transporte y el almacenamiento”.
El reglamento 1115 de la UE-27 determina que partir del 1 de enero de 2025 no podrán ingresar al territorio europeo productos agroindustriales provenientes de zonas que hayan sido deforestadas luego del 31 de diciembre de 2020. Los bienes comprendidos en la medida son aceite de palma, carne vacuna, soja, café, cacao, madera, carbón vegetal y caucho, así como productos derivados de los mismos.
“Los proveedores han presentado ofertas mínimas de mercado para las entregas del primer trimestre de 2025 a los fabricantes europeos de balanceados, lo que es atípico para este período”, alertó este martes FEFAC por medio de un comunicado.
La UE-27 requiere anualmente unas 30 millones de toneladas de harina de soja para poder abastecer las necesidades de la industria porcina, avícola, ganadera y lechera, entre otros sectores.
“La información de mercado recibida por los proveedores indica costos adicionales para proporcionar harina de soja que cumpla con la normativa antideforestación de un 5% a 10%”, remarca el comunicado.
La organización estimó que el costo adicional directo de los productos derivados de soja compatibles con la nueva norma para uso en balanceados en 2025 se estima entre 750 y 1500 millones de euros considerando tanto producto local como importado.
“Esto también generará mayores costos para las proteínas alternativas que están vinculadas a las cotizaciones de la harina de soja. El impacto combinado del costo adicional directo para los suministros de soja para el mercado de balanceados de la UE-27 en 2025 y los mayores costos adicionales esperados para otras fuentes de proteínas alternativas, como la harina de colza, de girasol y aminoácidos, pueden alcanzar hasta 2250 millones de euros. Esto provocará importantes impactos económicos adversos en el sector ganadero de la UE-27 y socavará seriamente su competitividad tanto internamente como en los mercados mundiales”, anticipó.
Uno de los aspectos más controvertidos de la nueva normativa es que clasificará a los países como de riesgo “bajo”, “estándar” o “alto”. Los productos de países de bajo riesgo estarán sujetos a un procedimiento simplificado de control, el cual se intensificará de manera proporcional en las siguientes dos categorías.
Los criterios para categorizar a los países son múltiples y aún no está claro cómo serán considerados y aplicados los mismos al momento de hacer la evaluación. Entre los factores comprendidos se incluyen presencia de bosques, presencia de comunidades aborígenes, prevalencia de deforestación o degradación forestal, dificultades presentes en el país (con criterios tales como nivel de corrupción o violación de los derechos humanos), características de las cadenas de suministros, riesgo de elusión o mezcla con productos de otros orígenes y antecedentes comerciales.
FEFAC indicó que, a partir de su propia evaluación, los proveedores de “riesgo bajo a medio” serán EE.UU. y Canadá, mientras que en la categoría “riesgo medio” quedarían comprendidos Argentina, Brasil y Paraguay y el “riesgo medio a alto” sería para Ucrania, Serbia y orígenes de la propia UE-27, dado que los países integrantes del bloque también deben cumplir con la normativa.
“La demora en la orientación práctica en apoyo de la implementación de la norma antideforestación por parte de la Comisión Europea reduce significativamente la disponibilidad de productos compatibles con la misma. Además, la cuota de mercado global de la UE-27 para el complejo sojero es inferior al 15% y está disminuyendo, lo que significa que los exportadores de soja tienen suficientes alternativas de mercado en otras naciones”, resumió FEFAC.
Lo único que busca la unión europea es reducir su población en el marco de la agenda 2030, destruyendo las familias, debilitando la dieta de los jóvenes e impulsar políticas mono géneros, usando escusas de calentamiento global, deforestación y cuánto verso se les ocurra…. Psicopateo mental de basuras en sombras ! Besitos.
Los europeos tienen a Rusia. Ah!!!!! Cierto que con su soberbia se pegaron un tiro en el pie.
¿ Vos te crees que con solo la pampa húmeda y parte de Córdoba y santa fe no completan el cupo?
Los jodidos son los del noroeste cordobés , parte de Traslasierra, Santiago , Chaco salta y Jujuy
Jodido tampoco estan esas provincias por que china compra todo !