Pablo Veguillas, distribuidor de agroinsumos de la zona centro de Santa Fe, recibió un video de uno de sus clientes y decidió compartirlo en redes sociales. En cuestión de horas se transformó en unos de los más vistos por la comunidad agropecuaria argentina.
El video en cuestión muestra a un productor cosechando un lote de soja de una soja raquítica afectada tanto por la sequía como las heladas tempranas de febrero.
El lote, que se encuentra en la zona cordobesa de Cruz Alta, justo en el límite con la provincia de Santa Fe, terminó rindiendo apenas 3,5 quintales por hectárea (350 kilos), es decir, alrededor de un 10% de lo que habría generado en un año climático normal.
Muchos preguntaron cuál es la razón por la cual se decidió cosechar un lote tan pobre que probablemente ni siquiera logre pagar el costo de recolección. La respuesta es que el productor, con campo y maquinaria propia, quería sacarse la duda de cuál era el rinde en tales condiciones jamás vistas por él.
Tristísimo avance de cosecha en la peor campaña agrícola de la historia.
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📽Cruz Alta – Córdoba pic.twitter.com/g6UbPVmBeU— Pablo Veguillas (@PabloVeguillas) April 11, 2023
La otra razón –más emocional– es que después del desastre productivo registrado en la presente campaña 2022/23, el productor quería hacer “borrón y cuenta nueva”, sacar esa imagen desoladora de su vista y comenzar a imaginar un ciclo 2023/24 más prometedor. Como la mayor parte de sus pares, es un optimista por naturaleza.
Según estimaciones de la plataforma AgBi, en la zona centro de Santa Fe el rendimiento de equilibrio para un planteo convencional con un precio actual de la soja Rosario de 340 dólares por tonelada, se encuentra en 32 quintales por hectárea.
Eso implica, considerando un valor de arrendamiento o costo de oportunidad de la tierra de 445 u$s/ha, que la pérdida económica estimada es del orden de 880 u$s/ha.
Las pérdidas productivas registradas por la soja en la región pampeana argentina son tan grandes que ni siquiera eliminando los derechos de exportación se lograrían revertir.
Si se considera una soja Rosario sin derechos de exportación con un precio final actual de 530 u$s/tonelada, el planteo en cuestión de la zona centro de Santa Fe lograría una pérdida de unos 820 u$s/ha.