Gustavo Grobocopatel no necesita demasiada presentación, aunque sí algunas aclaraciones. Desde hace un tiempo, el fundador de Los Grobo ha decidido vivir en Uruguay, un país que le ofrece sobre todo más calma que la Argentina, donde están la mayoría de sus afectos y sus intereses.
Esa misma calma es la que transmitió a Bichos de Campo cuando lo entrevistamos en el reciente Congreso de Aapresid, la semana pasada, antes de las elecciones primarias del domingo. “Yo estoy muy conforme con el proceso electoral. Para mí Argentina se ha robustecido desde el punto de vista institucional. Vos fijate que vinieron discusiones internas, debates y hay como un embudo donde cada vez van quedando menos candidatos y finalmente llegarán tres o cuatro a la elección general”, reflexionó.
Mirá la entrevista con Gustavo Grobocopatel:
“A mí no me asustan los debates, las discusiones. El único problema que hay en Argentina es que estos debates se dan en medio de una crisis de la ostia y que parece como una frivolidad el debate en relación a todos los quilombos que tenemos. Pero si los quilombos que tenemos hubiesen sido normales, este es un proceso democrático, te diría yo impecable”, aclaró el empresario agropecuario.
-Algo así como que estamos bailando en la cubierta del Titanic.
-Estamos votando en la cubierta del Titanic. Es así. Desde ese lugar, desde el proceso que me interesa, yo creo que vamos haca un proceso electoral que a mí me da esperanza también, porque me da la impresión de que estamos mal, pero tenemos una plataforma de conciencia mayor de los problemas que tenemos y de los debates que hay que dar.
Días atrás, durante la Exposición Rural de Palermo, los precandidatos (de ellos ahora sobrevivieron cuatro) presentaron sus propuestas para el agro. Más allá de los matices, todos ellos le prometen mayor diálogo al campo, reconocen que sus reclamos son legítimos en materia de retenciones, de brecha cambiaria. Y todos les prometen tomar algunas medidas, más rápido, más despacio. Frente a ese escenario, la pregunta obligada a Grobo es si sentía que el campo ya ganó algo en este proceso electoral.
Contestó: “Me parece que más que ganó. Ganó el campo real. (Con la sequía) La sociedad se dio cuenta de que un problema en el campo es un problema en la sociedad. Si no hay exportación, eso nos afecta a todos, no solamente a los productores agropecuarios. Me parece que hay un nivel de conciencia mucho mayor en amplios sectores de la comunidad. Antes se lo veía mucho más aislado al sector”.
-¿Sentís que esa es una batalla ganada?
-Creo que después de la crisis de la 125, la sociedad entiende que el campo es un sector moderno. Hasta la 125, el campo estaba muy vinculado con lo tradicional, lo conservador, pero a partir de ese momento la gente empezó a darse cuenta que no, que hay un sector que es innovador o que es productivo. En fin, se fueron como volteando paredes y resistencias. Y yo creo que esta es la última. Me parece que va a ser difícil para el próximo gobierno armar un plan económico que aporte sustentabilidad si el campo no es parte de eso y ya anda campeando.
-O sea que estás ilusionado con que el próximo gobierno, cualquiera sea el signo.
-Sí. En todo caso, se verá lo que van a hacer los gobiernos y que este proceso sea más ligero o más lento. Pero me parece que la dirección está, aunque la velocidad también importa. No solamente hay que ir por el camino correcto, sino a la velocidad correcta, porque si no los que vienen de atrás te llevan por delante.
-¿Y qué discusiones se debe el agro en un marco de nueva cordialidad con la política? Es que por parte del sector siempre surge el tema de las retenciones como único asunto prioritario.
-La salida de las retenciones va a generar un impulso productivo, una ampliación de la frontera, una expresión del uso de tecnología. Maravilloso. Desconocido. Pero eso no es suficiente para Argentina. Necesitamos procesar las materias primas, industrializarlas, generar servicios más sofisticados, etc. Exportar una matriz más diversa que los granos y productos alimenticios con marca, maquinaria, tecnología argentina. Entonces hay que generar, además de sacar las retenciones, una serie de mecanismos, de incentivos, para que esa sea la dirección de los ahorros o de la renta que se genere.
Francamente lo que diga este personaje mediático no representa ni le interesa a los productores agropecuarios genuinos. Estos nunca hubieran ido de la mano de NK a asesorar a Chávez. Tampoco se pueden dar el lujo de irse a vivir a Uruguay si no que se quedaron en su pueblo cerquita de su campo para tratar de sobrevivir. Este señor les hizo un daño terrible con su modelo de pool financiero subsidiado impositivamente. Ningún productor agropecuario tiene tiempo para dedicarle a supuestas veleidades artísticas como este señor. Y tampoco se pondrían a coquetear con las ideas de Grabois. No, lo que diga este personaje no nos interesa ni nos representa, todo lo contrario.