El secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, recibió esta tarde a los dirigentes nacionales de la Mesa de Enlace. Rodeado por las máximas autoridades del INTA (Instituto Nacional de Teccología Agropecuaria), les anunció que el gobierno desertó del proyecto para unificar ese organismo con el INTA (Tecnología Industrial) y la Conae (Actividades espaciales) como pretendía el ministro de modernización Federico Sturzenegger.
La definición, que fue comunicada a la prensa por los propios ruralistas ante la falta de voceros oficiales, cierra un capítulo de intriga sobre el futuro del INTA, donde los planes de Sturzenegger se chocaban de bruces con la estrategia de ajuste llevada adelante por el ministro Luis Caputo, su coordinador de producción Juan Pazo y el propio Iraeta: ellos quieren achicar la planta de ese instituto en 1.500 personas (un 25% respecto de la actual), pero sin fusiones ni nada por el estilo.
Pero a la par de que se supo en esta reunión que la línea de Economía se había impuesto a la de Desregulación en esta discusión interna, la zozobra para los empleados del INTA volvió a aparecer ni bien las autoridades de Agricultura anticiparon a los ruralistas que en los próximos días se emitirá un decreto para reestructurar o modernizar el organismo agropecuario.
El adjetivo de lo que sucederá con el INTA depende de quien sea el propalador de la noticia, porque la presidenta de Federación Agraria, Andrea Sarnari, habló de una “restructuración” y a su lado el titular de la Sociedad Rural, Nicolás Pino, corrigió esa palabra por “modernización”. En todo caso, nada que lleve tranquilidad y señales claras a una comunidad de científicos y técnicos que desde hace un año está en ascuas sobre su futuro laboral, en medio de las idas y vueltas de este gobierno.
“Puntualmente hoy lo que se trabajó fue sobre el tema de INTA. Estaban las autoridades, además del presidente y la vicepresidente de INTA, repensando cuál es el rol estratégico que las entidades creemos que tiene que tener el INTA, y ellos informándonos de alguna manera en lo que están pensando: Cómo reestructurar el INTA, cómo eficientizarlo y mejorar el funcionamiento”, informó la presidenta de Federación Agraria.
En ese sentido, la dirigente anticipó que las autoridades “están pensando en un decreto o en una reforma sobre el funcionamiento específico del instituto y nos anoticiaron de que no se va a unificar con el INTI”, tal com quería Sturzenegger.
-¿Hay una posición uniforme de la Mesa de Enlaces sobre el tema INTA en este momento?- le preguntó una periodista de La Nación.
-Sí, claro. Tenemos la posición tomada de que necesitamos el instituto y creemos también que hay lugares o líneas de INTA que hay que mejorar, que hay que reestructurar, porque tiene que ser un Instituto que esté al servicio del productor y pensando estratégicamente también para la Nación, no solo para el productor. Hay una línea que por supuesto compartimos en las cuatro entidades.
Por cierto, las cuatro entidades rurales (SRA, Federación Agraria, Coninagro y CRA) más los grupos CREA tienen un representante cada una en el Consejo Directivo del INTA y los consejos regionales, y por lo tanto han venido interviniendo históricamente en la conducción y definición de estrategias dentro del mismo. De hecho, en las últimas reuniones de ese Consejo, que por ley es la máxima autoridad política dentro del Instituto, esa mayoría “privada” ha votado a favor de los planes de Caputo y Pazo para intervenir la dirección nacional y crear una secretaría que acumulará funciones administrativa y de gestión. Posiblemente el decreto apunte a consolidar jurídicamente ese movimiento, ya que los gremios lo consideran una “intervención” que lesiona lo establecido por la Ley de l INTA y piensan llevar el tema a la justicia.
Los dirigentes rurales salieron convencidos de que Economía respetará sus opiniones en el rediseño del organismo, que no sería entonces (como parece hasta aquí) solo un plan de ajuste ortodoxo, con la venta de campos y el despido de cientos de empleados. “En eso va a trabajar el Consejo Directivo de INTA puntualmente. Hay un plan estratégico ya trazado de INTA y lo que se va a hacer es retrabajar sobre ese plan estratégico”, comentó Sarnari.
Más tarde, el titular de la Sociedad Rural corrigió a su colega: “Capaz que estaría mejor hablar de una modernización del INTA, ¿no? Y apuntar a eso. Ahí a las cuatro entidades nos van a encontrar seguro opinando lo mismo. Las formas, del cómo, es lo que hay que trabajar”, dijo Pino.
El dirigente agregó que “el plan estratégico existente dentro del INTA data del año 2015. Bueno, el consejo directivo va a trabajar a ver de qué manera se puede aggiornar y modernizar ese plan estratégico”.
Lo que quedó claro, o al menos lo que transmitió Iraeta, es que en esta pulseada se impuso Economía sobre Sturzenegger y que, en consecuencia, el INTA no se fa a fusionar dentro de un gran organismo tecnológico. “No se van a fusionar”, enfatizó Pino, pero de inmediato agregó: “Yo entendí que gran parte de los trabajos que hace el INTI están referidos a investigaciones del sector agropecuario. Entonces, que ese tipo de trabajos van a pasar a la órbita del INTA”.
Entre las flacas definiciones de las autoridades (que siguen sin brindar conferencias de prensa), surgió también que el INASE (Instituto Nacional de Semillas) no sufriría cambios ni se eliminaría, como también tenía en carpeta el ministro desregulador. “No se habló de eso, pero hace rato se viene diciendo que INASE va a seguir bajo la órbita de Agricultura”, indicó Sarnari.