Los precios de los futuros del complejo sojero en el mercado estadounidense CME Group (“Chicago”) registraron importantes alzas intradiarias este lunes en línea con pronósticos meteorológicos desfavorables en Brasil.
El Servicio Meteorológico de Brasil (Inmet) proyectó que algunas regiones sojeras claves del país prácticamente no recibirían precipitaciones en la próxima semana.
No se trata de la mejor noticia porque gran parte del noreste y centro del territorio nacional viene recibiendo lluvias inferiores a las normales desde que comenzó la campaña gruesa.
Adicionalmente, Inmet pronosticó hoy el avance de una ola de calor que podría culminar el próximo 16 de diciembre con máximos superiores a los 36 ºC en los estados de Mat Grosso do Sul, Goiás, Sao Paulo, Rio Grande do Sul y Paraná.
La última estimación de la cosecha brasileña de soja 2023/24, publicada la semana pasada por el Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA), indica una producción de 161,0 millones de toneladas con una oferta exportable de poroto para el período de 99,5 millones.
Cualquier ajuste de esa cifra, producto de problemas climáticos, implicaría que EE.UU. debería cubrir el bache dejado por Brasil, lo que no resulta sencillo con un stock final de soja previsto en EE.UU. de apenas 6,6 millones de toneladas para el ciclo comercial 2023/24.
En cuanto a la Argentina, si bien cabe esperar una recuperación de la producción de soja en 2023/24 luego del desastre registrado en 2022/23, no es factible hasta el momento proyectar cómo podría regularse el flujo comercial del poroto en un entorno cambiario por demás inestable e incierto.
Este lunes comenzó la presidencia de Javier Milei sin novedades en materia de política económica, lo que implica que la comercialización de granos en general y soja en particular sigue –como hace semanas– virtualmente congelada.