Luego de los anuncios del gobierno, que había prometido cerrar las exportaciones de carne solo por un mes y ahora extendió ese cepo hasta finales de año, los productores agropecuarios mostraron su enojo y, mediante diferentes pronunciamientos comenzaron a meter presión a la Mesa de Enlace para que se defina una nueva protesta aún más dura que el paro ganadero de 14 días que se llevó a cabo en mayo.
Luego de una reunión con el presidente Alberto Fernández en la Casa Rosada, donde los dirigentes de la Mesa de Enlace fueron anoticiados del nuevo esquema de exportaciones de carne, las entidades agropecuarias habilitaron un periodo de consulta a “las bases” antes de definir los pasos a seguir.
Este mecanismo institucional llevará algún tiempo y les permitirá ganar algunos días antes de definirse. En medio, los ruralistas de CRA, Federación Agraria, Coninagro y la Sociedad Rural esperan ser recibidos por los gobernadores de las provincias ganaderas.
Pero las famosas bases comenzaron a hablar mucho más rápido de lo que se pensaba, enojadas con el estado de cosas. El cepo exportador, según el punto de vista de los productores, solo los perjudicará a ellos sin beneficiar a los consumidores, como declama el gobierno a la hora de tomar esta medida.
La primera presión para la Mesa de Enlace la ejercieron los productores “autoconvocados”, que suelen expresar las posiciones más duras. Ni bien se confirmó que seguirían prohibidas las exportaciones de siete cortes y que habría que achicar los embarques un 50% respecto de 2020, estos sectores lanzaron la convocatoria a una movilización en la ciudad bonaerense de San Nicolás, para el próximo feriado del 9 de julio.
10hs – La batalla de San Nicolás #9JYoVoy pic.twitter.com/xdV2m6hgWx
— Autoconvocados del campo (@autoconvDelCamp) June 23, 2021
Pero de modo orgánico comenzaron a pronunciarse también entidades territoriales de la propia Mesa de Enlace, y los tonos no eran mejores.
Desde Córdoba, la Sociedad Rural de Jesús María estableció con dureza que “hemos asistido a un nuevo engaño para con la ciudadanía en general, que se enmarca en la estrategia electoralista de un gobierno que sólo quiere sumar votos para las legislativas a costa de lo que sea. Incluso, anunciando un cierre de mercado como una apertura”.
Los cordobeses enrolados en Cartez, la confederación mediterránea de CRA, calificaron como un acto de “cinismo” los intentos del gobierno de mostrar el nuevo esquema exportador como parte de un “acuerdo” con el sector. Y denunciaron que “otra acción falaz y demostrativa de inoperancia es hablar de crear ahora una comisión que trabaje en un Plan Ganadero. Se pueden contar por decenas las propuestas acercadas a todos los gobiernos desde los sectores que desarrollan la actividad y siempre fueron cajoneadas como deporte nacional”, recordaron.
Desde Santa Fe, las bases de la Mesa de Enlace hicieron rápido los deberes y emitieron un comunicado conjunto de las cuatro organizaciones gremiales, en el que rechazaron el nuevo decreto presidencial que suspende las exportaciones de carne bovina.
La Mesa de Enlace de Santa Fe ante suspensión de exportaciones de carne 23-06-2021-o (1)“Insistir con prohibir la exportación de cortes de carne que el ciudadano argentino no consume es un error, y argumentar que con dichas medidas se va a solucionar el problema de los precios en el mostrador es una falacia, que pretende tomar por ingenuos a todos. En el problema de la inflación incontrolable de los precios en general poca o nula incidencia tienen los chinos y su apetencia por nuestras carnes de vacas de descarte”, avisaron los santafesinos.
Mientras tanto, la confederación más numerosa de las que integran CRA, la bonaerense y pampeana Carbap, se coincidió en expresar rechazo contra el nuevo cepo de las exportaciones de carne. El miércoles esta entidad avisó que reunirá a su consejo directivo, para eventualmente definir medidas de acción gremial.
De todos modos, en un comunicado, quedó claro la molestia también entre lso dirigentes de Carbap. “Las medidas anunciadas solo benefician a los países que exportaran lo que nuestro país no puede exportar y perjudican a los productores por la baja en los precios de los animales, a los consumidores por el aumento de la carne, al país que resignara ingresos por retenciones, a los frigoríficos exportadores que deberán suspender operarios, a los trabajadores de frigoríficos que verán peligrar sus fuente laborales. En síntesis, la medida es nefasta y ya se aplicó en el pasado y fracasó”, recordaron con dureza.