Patricia Landeta aún conserva la escritura de sus 94 hectáreas de tierra que heredó de su familia, en Navarro, provincia de Buenos Aires. La misma, data de 1853 y desde aquel año, sus ancestros, provenientes de colonias de vascos franceses e irlandeses, llevaron adelante un desarrollo siempre agrícola. “Luego mi padre hacía agricultura bajo un modelo tradicional -cuenta Patricia-, con rotación de potreros, logrando una tierra muy rica en nutrientes, hasta que en el año 2012 tuvo que hacer el debido traspaso generacional. Y yo, hija única, me vi en la necesidad de replantearme cómo seguir”.
“Junto a Leonardo Gimeno, mi pareja y socio en la vida y el trabajo –aclara, risueña-, decidimos cambiar aquel modelo, apostando a una producción con el potencial de agregado de valor y con posibilidad de exportar, a un producto requerido contra estación”, recuerda.
Explica Patricia que, siendo ella contadora, aquella fue una estrategia con una buena base de conocimiento del mundo de los mercados, porque Leonardo es ingeniero aeronáutico, con una experiencia de más de 30 años dedicados a sistemas de automatización y control, y siempre fue un apasionado del marketing. “Entonces nos pusimos a investigar los mercados, nacional e internacional, con ayuda de profesionales, -continúa Patricia- acerca de qué cultivo podría ser y nos decidimos por la nuez Pecán, un producto saludable y con demanda creciente en el mundo. Pero antes, hicimos estudios de factibilidad de suelo y clima, que en Navarro es muy bueno y se caracteriza por tener un buen caudal de lluvias, salvo en estos últimos años de sequía“, aclara.
“En aquel mismo año, 2012, -cuenta Leonardo- dimos nacimiento a Food-Brain SRL, con el objeto de elaborar productos saludables de calidad para el consumo humano. Apostamos a la nuez Pecán con proyección de exportar, pero no sólo nueces sino sobre todo productos elaborados con alto valor agregado, es decir, apostando a la industrialización”.
“Es notable cómo crece la demanda de la nuez Pecán a nivel mundial, de modo similar al pistacho, acercándose cada vez más a la de la nuez Chandler, que es la más desarrollada. Tiene un abanico enorme de posibilidades, para dietas veganas y keto, apta para celíacos”, añade.
Y agrega que “en el rubro de panificados se está incorporando mucho la harina de nuez Pecán porque posee un alto contenido de materia grasa (70%), que puede remplazar a la manteca. Por esto se la denomina ‘La reina de los frutos secos’, y por sus minerales, y su alto contenido de Omega 3, 6 y 9, siendo antioxidante. Si se consumen hasta tres nueces por día, repercute muy sanamente en la salud, sobre todo en beneficios cardíacos”, refuerza el ingeniero.
“Actualmente –continúa Landeta- tenemos 90 hectáreas con una producción intensiva. Luego de recibir asesoramiento del INTA y de la Universidad de Lomas de Zamora, decidimos plantar seis variedades de Pecán: pawnee, shoshoni, cape fear, desirable, summner y stuart. También trabajamos con Senasa y con UBA. Todos estos organismos nos proveen de muchísima información y nos traen estudiantes para trabajos de postgrado”.
“También lo hacemos con la escuela agrotécnica de Navarro –agrega Leonardo-. Junto al INTA hicimos en ella jornadas de capacitación, porque para la producción, poda y cosecha siempre estamos necesitando mucho recurso humano. Es que la nuez Pecán es un cultivo nuevo en nuestro país, que la mayoría no conoce. Está en pleno desarrollo, con apenas 10.000 hectáreas cultivadas y unas 1000 que se van sumando cada año”.
Cuenta Patricia que la cosecha en su zona es de abril a julio, pero en Entre Ríos se inicia un poco antes. “Hoy producimos 50 toneladas de nueces peladas por año”, estima. “Elaboramos productos como harina y aceite de nuez, nueces peladas o con cáscara, garrapiñadas, bañadas en chocolate, en pastas y en alfajores, y cookies. Creamos la marca Puerto Pecán y seguimos investigando para sumar nuevos productos, con gran ayuda de nutricionistas”.
Sigue Leonardo: “Tratamos de tener la más alta inocuidad en nuestros procesos, pelamos la nuez mecánicamente y la deshidratamos en hornos especiales durante varias horas para llegar al punto de humedad con el fin de evitar que se ponga rancia. Sólo vendemos en forma mayorista, buscamos tener cada vez más trazabilidad con nuestros productos y ponemos mucho cuidado en nuestro servicio de post-venta”.
Patricia y Leonardo viven en Monte Grande, donde tienen montada la fábrica de elaborados y las oficinas, porque consideran a esa localidad un punto estratégico para la distribución. Ella se ocupa de la administración y las finanzas y él, por su profesión, es un apasionado de la tecnología. “Después de ver los hornos de deshidratado que se ofertan en el mercado, me puse a fabricarlos yo mismo”, cuenta el ingeniero, quien principalmente se ocupa del gerenciamiento operativo y la comercialización. Una hija de Patricia difunde los productos en las redes.
“Tenemos tres centros operativos –detalla Leonardo. El establecimiento primario con la plantación. Un depósito en la ciudad de Navarro, donde se decide el destino del producto. Y una planta de elaboración de los productos. Hemos elaborado un plan a 24 y a 36 meses para integrar los 3 sectores del proceso en un parque industrial, pero estamos analizando si concretarlo en Navarro o en Monte Grande”.
El movimiento es grande: “En plena temporada alta, de mayo a julio, contratamos a unas 22 personas, que incluye el personal para los tres meses de cosecha. Aún no tenemos suficientes nueces para elaborar todo el año. Para ello, necesitamos aumentar los cultivos y así podremos tener empleados permanentes”.
“En 2019 empezamos a exportar a Hong Kong, junto a otros productores, pero nos sobrevino la pandemia –recuerda Patricia- y se volvió muy riesgoso seguir, de modo que lo suspendimos. Nos concentramos en el mercado nacional, dedicándonos a desarrollar nuevos productos y hoy nos estamos preparando para volver a exportar. Nuestra planta está produciendo al 40%”.
“Por ahora todos en la familia empujamos nuestra empresita con mucho amor y sacrificio. No estamos solos, porque tenemos proveedores estratégicos que nos aportan calidad en la cadena. Argentina es un país ideal para agregar valor, porque tenemos las herramientas necesarias. Somos muy ricos en la producción primaria, pero lamentablemente tenemos que lidiar para poder industrializar y exportar”, se queja.
“Nos hemos propuesto elaborar un producto que pueda ser igual o mejor que el de otros países –agrega Leonardo-. Debemos llegar al mercado externo en forma competitiva, con un producto de nivel internacional. Nuestro packaging no compite con el del resto del mundo. México, Australia, Sudáfrica son nuestros competidores y Estados Unidos nos lleva 100 años de ventaja”.
“En el medio vamos necesitando aportes de capital, pero no es fácil hallar financiamiento. Necesitamos renovar nuestro sistema de riego, 110 kilómetros de mangueras, y es todo un desafío. Necesitamos que se respalde la industrialización para poder incorporar del exterior tecnología de punta y de paso bajar costos. Porque PyME que no se desarrolla, muere. Todo esto pone en riesgo la sostenibilidad de cualquier negocio en los mercados. Y hoy lo más difícil es construir los equipos de personal a la hora de ir creciendo. Nos urge reconstruir la cultura del trabajo en nuestro país, para poder tener más gente estable, y así poder crecer en volúmenes de producción y ventas en el mercado”.
Patricia y Leonardo nos dedicaron la canción “Juntos a la par”, de Julio César Rutigliano, alias “Yulie Ruth”, por Norberto Aníbal “Pappo” Napolitano.
Que tremanda historia!
Que importante el rol del INTA, las Universidades y escuelas agrotecnicas.
Sin dudas hay que dar mas apoyo a industrializar los procesos, y si son in situ o en ciudades cercanas mucho mejor, fomenta el arraigo de las personas y puede desarrollar el interior.
Y sin dudas, la nuez pecan es el futuro.
Es industrializando la producción primaria, la forma de brindar trabajo genuino y hacer que nuestro país despegue. Felicitaciones por atreverse a innovar!!
Quisiera el diario digitañ todos los dias como tengo que hacer
Me fascina las notas de gente que se juega a hacer lo que les gusta, el campo da pero también hay que estar en las sequías, vientos, granizadas, bichos, me encantó el proyecto de las nueces súper importante, los felicito