“El campo argentino vuelve a sentir la alegría de estar en un negocio tan trascendente. Creo que están contentos. Yo estoy muy contento”. Así lo indicó Alejandro Elsztain, CEO de Cresud, durante una charla ofrecida en la Bolsa de Comercio de Córdoba.
“La brecha cambiaria es peor que las retenciones para el agro”, aseguró ayer miércoles Elsztain, para luego añadir que, debido a las distorsiones cambiarias, “en un momento el productor sojero de EE.UU. cobraba 500 u$s/tonelada y nosotros 170 u$s/tonelada. Y estamos vivos; perdimos mucho lugar en el mundo, pero sobrevivimos”.
El CEO de Cresud celebró la unificación cambiaria instrumentada el pasado 14 de abril. “Los productores van a estar expectantes porque están todos especulando si bajan las retenciones o si las vuelve a subir el presidente (Javier Milei); están expectantes, pero contentos porque cuando venden cobra los dólares enteros”, afirmó.
En lo que respecta al negocio agrícola de la presenta campaña 2024/25, señaló que “los números del negocio cierran” y que “si el productor vendió a 170 u$s/tonelada y sobrevivió, a 270 u$s/tonelada sí le sigue cerrando. Son márgenes más ajustados, pero son ganancias. Con 3,0 a 3,5 toneladas/ha de soja y esos precios, el campo tiene márgenes positivos”.
En términos generales, el empresario dijo que “los resultados del año van a ser buenos, no excelentes, aunque en algunas regiones no por la parte productiva”.
Elsztain dijo que el negocio agrícola experimentó un cambio importante porque con el anterior gobierno las utilidades se generaban por resultados financieros, mientras que en la actual coyuntura “viene una época muy productivista”.
“Tenemos escala y juventud dedicada al negocio”, se esperanzó, aunque resumió una serie de ítems que deben cumplirse para que el agro argentino pueda prosperar y alinearse con el proceso de desarrollo que experimenta Brasil. Entre tales factores se incluye la reducción o eliminación de los derechos de exportación. “En el mundo no hay retenciones porque se subsidia a los productores; es una mala práctica”.
El CEO de Cresud –que este año sembrará más de 300.000 hectáreas propias y arrendadas en Brasil, Argentina, Paraguay y Bolivia– explicó que la destrucción de valor instrumentada en la Argentina por distorsiones cambiarias y tributarias puede visualizarse en la evolución del precio de la tierra.
“En 2006 con Cresud fuimos a Brasil y por entonces las mejores fábricas aceiteras se estaban construyendo en la Argentina. La tierra productiva en la Argentina siempre estuvo relacionada con el valor presente en el Corn Belt estadounidense, pero en 2012 comenzó una desconexión entre ambos activos”, señaló.
“Nosotros en 2006 tuvimos la oportunidad de comprar en Brasil tierras que no valían nada y hoy valen oro. Hubo una fiesta de la tierra en Brasil que lamentablemente la Argentina se perdió”, agregó.
La compañía tiene un promedio de 17.000 hectáreas vendidas por año (equivalente al 3,0% del portofolio total). “Tenemos tasas de retorno altísimos con la venta de campos”, comentó.
Por último, destacó que para proveer de servicios a la unidad agrícola, Cresud creó la firma FyO, que fue creciendo y actualmente es el principal broker agrícola de la Argentina con más de 7,0 millones de toneladas comercializadas por año y es un proveedor de servicios crediticios y financieros para empresas agropecuarias.
Lamentable la postura de Elsztain de aceptar la confiscacion de la renta agropecuaria con los DEX.
Por lo expresado la principal actividad de Cresud es inmobiliaria, no hay nada que objetar por tal tarea.
Pero el negocio agrícola pasa a segundo plano ya que con valores de 170 usd la soja, los valores de la tierra hacen más favorable su compra
El cáncer de la producción siempre fueron las distintas distorsiones y disociaciónes, entre lo producido y sus costos.
Las retenciones fueron siempre la distorsión mayor.
El tipo de cambio sincera los precios (ingresos y costos) pero los ingresos siempre suben por la escalera y se bajan tirándose del balcón.
Los costos en cambio siempre cómodos por el lento y oxidado asensor
La Es..el Refugio..en Sauce Luna ..Prov de Entre Ríos..la pagaron 600uss…la alquilaron siempre para arroz..y piden uss 2500 para venderla…..negocio de judío…no de productor
Tu comentario es antisemita Sodero, vos haces malos negocios? El que compra convalida el precio.
Desde lo puramente productivo es difícil entender el optimismo de Elsztain. Basta ver los números de FADA, CREA, etc. Seguramente lo suyo pasa por carriles distintos a los de un productor agropecuario genuino. Indudablemente el negocio inmobiliario es una actividad muy rentable para Cresud.
El productor agropecuario tiene la culpa por no saber unirse y no vender su producción. El Estado sigue ordeñando tu propia vaca que tenës que ordeñar, cuidar, alimentar y curar de Enero a Enero. Hay que unirse y conformar una fuerza propia y no permitir que nadie lucre con tu producido; es lo que hacen en Australia, Uruguay, EEUU y muchos países. Si pudimos soportar sequias, nos fundimos varias veces y no cosechamos nada mas de una vez, porqué no podtíamos cerrar las tranqueras uno o dos años hasta lograr que tu esfuerzo sea tuyo y no de los Buitres?.
A este muchacho,le avisaron que el 60/70% de la producción agrícola se hace sobre campos arrendados ?
Si el negocio no fuese atractivo, los arrendatarios no estarían pagando promedio 16 qq de soja y ya se hubiesen rajado todos de los lotes.
Totalmente de acuerdo,,,con vos,,no puede opinar generalizando como lo hace,,el contratista necesita con esos precios rendimientos altísimos,,,ahora quien es dueño y produce su propia campo no tiene ningún problema financiero
Estos son los terratenientes que le hablan al oído a los funcionarios que toman las decisiones para que no toquen las retenciones, nada cambie y puedan seguir haciendo su negocio a costa del sudor de los productores. Te hacen un juego de números con economistas en un Excel, una tabla evolutiva de precios te zarandean con precios de venta de la tierra, hacen cerrar el número para que acompañe el discurso y les dicen “el negocio les da”. Hay que salir a contrastar esos números, por eso hace falta la profesionalización de nuestra federaciones para salir a combatir con argumentos estas falacias, llevar la voz a los funcionarios y así tal vez tener una opción de que no nos sigan robando con las retenciones. Sino todos destinados a ponerle moño y darle la tierra a estas empresas que son las únicas que les va bien.
Así es Augusto, totalmente de acuerdo con lo que decir. Alguien tiene salir que refutar esos análisis