El “mercado climático” estadounidense está promoviendo una volatilidad mayúscula en las cotizaciones de los futuros de granos gruesos en el CME Group (“Chicago”).
Este lunes el Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA) indicó que al pasado 30 de julio el 55% del área de maíz en los principales estados agrícolas de esa nación se encontraba en estado bueno a excelente versus un 57% una semana atrás y un 61% un año atrás.
El 84% de la superficie de maíz se encuentra en la etapa crítica de R1, en la cual el polen cae en los estigmas para potencialmente fertilizar los óvulos que deberán generar los granos.
En cuanto a la soja, el USDA indicó que el 52% del área se encuentra en situación buena a excelente versus un 53% una semana atrás. En este caso también el indicador sigue estando lejos del 60% correspondiente al presente un año atrás.
En cuanto a la fase de crecimiento del cultivo de soja, el 83% del área –según el USDA– se encuentra en floración, al tiempo que un 50% ya está en el período de formación de vainas.
Sin embargo, para la próxima semana el Servicio Meteorológico de EE.UU. (NOAA) proyecta precipitaciones abundantes –con algunas tormentas severas– en el sur del Medio Oeste, al tiempo que en el sector oeste de dicha región prevalecerían lluvias moderadas a leves.
El noreste del Medio Oeste, si bien no recibiría lluvias abundantes en los próximos siete días, es el menos comprometido por el déficit hídrico que está complicando la evolución de los cultivos de granos gruesos en EE.UU.
En ese marco, los administradores de fondos de inversión agrícolas, que habían comenzado a “comprarse” la semana pasada, este lunes liquidaron posiciones a dos manos para captar utilidades ante el nuevo pronóstico meteorológico.
Por se motivo, en la jornada de hoy se registraron bajas intradiarias profundas de los precios de todos los futuros agríolas del CME Group, algo que, por su magnitud, sólo se explica por el accionar de los operadores especulativos.