Los análisis preliminares del mercado de fertilizantes de Argentina, elaborados por la Asociación Fertilizar, indican que en 2021 se registraría un nuevo crecimiento del consumo de fertilizantes. Este es quizás el mejor argumento para discutir con el gobierno y convencerlo de lo dañino que sería “desacoplar” todavía más los precios internos del trigo y el maíz, con cupos de exportación, fideicomisos o subiendo las retenciones. Es que son esos dos cereales los que explican estos buenos niveles de reposición de nutrientes en los suelos.
Fertilizar, una entidad cuyo objetivo es promover el uso responsable de la fertilización de cultivos, estimó que el uso de esos insumos por parte de los productores habría totalizado 5,6 millones de toneladas. Se trata de una cifra récord, que se ubica entre 6 y 8% por encima de la anterior marca de 2020.
“Este crecimiento se explica por una consolidación en la superficie sembrada de las principales gramíneas en la rotación, principalmente a trigo, maíz y sorgo, lo que genera amplios beneficios al sistema, ya que permite mejorar el balance de carbono y por consiguiente la materia orgánica del suelo”, comentó Francisco Llambías, presidente de la entidad.
Un informe de Fetilizar añadió que las dosis de fertilizantes utilizadas en gramíneas, han mejorado su nivel de aplicación, sobre todo traccionado por los buenos precios de los cereales.
“En gramíneas, si bien aún queda por crecer, se ha registrado una gran mejora en las estrategias de fertilización, que, asociadas a las buenas precipitaciones ocurridas en la campaña de la fina, estarían concluyendo en una gran cosecha trigo 2021″, explicó María Fernanda González Sanjuan, gerente ejecutiva de Fertilizar.
La especialista aclaró que, en cambio, la fertilización en soja “es aún insuficiente, necesitando este cultivo optimizar aún más su nivel tecnológico, contemplando nutrientes como fósforo y azufre fundamentalmente”. La soja, sabido es, tributa un máximo de 33% de retenciones, mientras que el resto de los cultivos quedó con un derecho de exportación más moderado de 12%.
Fertilizar destacó que el crecimiento de la fertilización en esta última campaña agrícola se da en el marco de las denominadas Buenas Prácticas Agropecuarias (BPA), “lo que contribuye a reforzar el foco de la institución en la sostenibilidad del ambiente productivo y la calidad de los alimentos que se producen”.
“Desde Fertilizar celebramos que cada año el uso esta tecnología se fortalezca y sea considerada fundamental para poder alcanzar altos rendimientos en los cultivos, traduciéndose en beneficios no sólo a nivel productivo, sino en cuanto al cuidado del recurso suelo y el ambiente productivo”, concluyó Llambías.