“Luego de la apertura del Concurso de SanCor CUL, la empresa continúa con el incumplimiento salarial. Es decir, nos adeuda hacia atrás del concurso, y tampoco nos paga hacia adelante”. Eso fue lo que advirtió en un comunicado el cuerpo de delegados del gremio Atilra en dicha empresa láctea.
De este modo el sindicato láçteo, al que muchos consideran corresponsable de la caída en desgracia de Sancor hasta su ingreso a un concurso de acreedores en marzo pasado, volvió a mostrar los dientes después de un impasse de algunos meses. Amagó con un “plan nacional de lucha” para denunciar los nuevos incumplimientos de la firma, que podría incluir incluso una marcha hacia la sede del juzgado comercial de Rafaela que entiende en el expediente de la convocatoria de acreedores.
El comunicado de los delegados de Sancor se conoció luego de que se conocieran negociaciones de la cooperativa concursada con otros actores del sector lácteo (especialmente con la empresa fabricante de la manteca Tonadita) para reactivar parcialmente sus actividades en algunas plantas.
Los delegados, como representante de los trabajadores, recordaron que son “afectados directos de esta dramática situación, donde nosotros no somos cualquier acreedor sino que nuestros créditos (los salarios adeudados) tienen carácter alimentario porque nuestro salario resulta vital e imprescindible como único medio de subsistencia de nuestras familias”.
Por eso, reclamaron a la cooperativa que de modo urgente explique al gremio el alcance de dichas negociaciones.
Atilra recordó que “la propia empresa ha comunicado al Juzgado la existencia de propuestas por parte de inversores interesados en la reactivación de las plantas industriales hoy por hoy paralizadas en un 90%”.
Y remarcó: “Teniendo en cuenta que el pasivo denunciado por la empresa -avalada por la verificación de créditos presentada- supera largamente el activo, la paralización de la actividad conlleva directamente a una quiebra donde quedaremos todos sin trabajo y ni nosotros ni el resto de los acreedores cobrará un peso produciéndose el desguace y cierre de las plantas con toda la gente en la calle”, según especuló el sindicato, que reclamó a los jueves que arbitren los medios para asegurar el cobro de salarios y las fuentes de trabajo.