Tratando de quebrar la resistencia de decenas de municipios “rebeldes” y hasta provincias enteras que fijan sus propias reglas y están entorpeciendo la circulación de camiones de carga, el Ministerio de Transporte de la Nación emitió este miércoles un “permiso de circulación nacional” que debería servir para que todos los transportistas no sufran inconvenientes mientras realizan su tarea, que se ha convertido en clave para llevar alimentos y otros aprovisionamientos al restod e la sociedad en medio de la gran cuarentena para frenara el avance del coronavirus.
El salvoconducto emitido por el ministerio de Transporte mediante la Resolución 74/20 supuestamente habilita a circular a los transportistas incluidos en los servicios esenciales, en el marco de la disposición del gobierno de someter a toda la población a un aislamiento preventivo y obligatorio.
Como hemos venido contando en Bichos de Campo, estas órdenes presidenciales tropiezan en los hechos con la resistencia de muchos municipios y hasta gobernaciones (el ejemplo más claro es la de San Luis o la propia Ciudad de Buenos Aires, que han restringido la cantidad de pasos habilitados), que ponen muchas trabas al movimiento de este tipo de camiones a pesar de la excepción declarada por el gobierno Nacional.
Esta situación ha sido denunciada además por toda la cadena agrícola y por la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), debido a que se está entorpeciendo el tránsito en plena cosecha de soja, provocando faltantes en acopios y puertos. La entidad que preside Gustavo Idígoras ha denunciado esto por carta al ministro de Transporte, Mario Meoni, y toda la cadena agroindustrial envió una carta a los gobernadores pidiendo una solución.
Más allá de que los transportistas ahora cuenten con un certificado extendido por las autoridades nacionales que intentan resolver esta situación, otra realidad por estas horas es que muchos de ellos no quieren tomar viajes largos, ya sea por temor a ser factores de contagio para sus propios pueblos o por el “destrato” que dicen padecer en las rutas, por la falta de condiciones adecuadas para circular y la proliferación de retenes en los municipios. Muchos de ellos cortan con montañas de tierra las rutas para evitar la circulación de camiones.
“En las rutas las estaciones de servicios no les permiten bajar ni comprar alimentos, ni utilizar los baños para higienizarse. No cuentan con los elementos de protección e higiene necesarios. Para el caso que necesiten alguna reparación en la ruta no hay talleres ni gomerías abiertas y no pueden ingresar a los pueblos”, declaró la Federación de Transportistas Argentinos (FETRA) en un comunicado.
Para el caso específico de los transportistas de granos, FETRA declaró que “si bien las empresas de acopio y de exportación de granos manifiestan su intención de aplicar protocolos de protección, la realidad es que no lo están haciendo y los transportistas se sienten totalmente desprotegidos”, sumado a que también se reportaron muchos hechos de inseguridad en las inmediaciones portuarias.
“Sólo dos provincias- Santa Fe y Córdoba- trabajan en la implementación de medidas para cuidar de su salud en los corredores viales”, advirtió la entidad.
En el caso de las estaciones de servicio, que muchos camioneros denuncian que no los dejan bajar ni utilizar sus instalaciones, la petrolera Shell ya firmó un convenio para habilitar esas bocas de expendio para que reciban a los transportistas. Y lo mismo, según fuentes de FADEEAC, la otra gran confederación del transporte de cargas, se anunciaría en las próximas horas para la petrolera estatal YPF.