El fracaso del operativo “dólar soja 3” llevó al gobierno nacional a la necesidad de ampliar la “paleta” de cultivos que podrán acceder al tipo de cambio preferencial de 300 $/u$s hasta fines de mayo próximo.
La particularidad es que, en el caso de la cebada forrajera, sorgo y girasol se procedió a implementar cupos de exportación, algo novedoso para los dos primeros, pero no para la oleaginosa, la cual ya se encuentra condicionada en el marco de lo dispuesto por el “fideicomiso aceitero”.
El producto más comprometido por la nueva intervención oficial es la cebada forrajera, dado que, con un cupo de exportación de 2,00 millones de toneladas para el ciclo 2022/23, ya se registraron DJVE por 1,308 millones, lo que implica que ya se cubrió el 65% del cupo disponible.
No se trata de una buena noticia para los productores de cebada, dado que, cuando los exportadores logren completar el cupo de exportación asignado, el mercado quedará en manos de los consumos internos, que –a diferencia del trigo– tiene una demanda mucho más limitada.
Esa restricción, combinada con un potencial factor bajista en el mercado internacional –la recomposición de relaciones comerciales entre China y Australia–, puede representar una auténtica “pesadilla” para los productores de cebada sin comercializar o bien con fijaciones abiertas.
La producción total de cebada en 2022/23, según datos oficiales, fue de 4,50 millones de toneladas, de los cuales al menos un millón correspondería a calidad cervecera, mientras que los restantes 3,50 millones se destinarían a forrajera.
Al 12 de abril pasado, según el último dato oficial disponible, los productores habían comercializado 1,422 millones de toneladas de cebada forrajera, de los cuales la mayor parte (1,345 millones) tienen precio hecho.
En lo que respecta al girasol, como la comercialización de la oleaginosa en la presente campaña viene muy retrasada por los bajos precios del cultivo, la mayor parte del cupo sigue habilitado. Lo mismo puede decirse del sorgo.
Este gobierno no le queda nada por toquetear y dejar el negocio en manos de algún vivo de turno(importadores de neumáticos, exportadores de granos, etc etc).
Lamentablemente seremos los siervos mientras no tengamos poder de movilización y tendremos que agudizar el ingenio para seguir produciendo y sobrevivir con menos margen.
Peronia. Ya falta poco
PERONIA…dónde si amagas inversión ya te clavan impuestos,retenciones o trabas