La fortaleza registrada por las cotizaciones internacionales del aceite de soja no logró compensar la “pesadez” que está empezando a experimentar la harina.
Hoy miércoles se registraron importantes alzas intradiarias en las cotizaciones del petróleo crudo que contagiaron los valores de los futuros del aceite de soja en el mercado estadounidense CME Group, dado que ese insumo se emplea en EE.UU. (y en muchas otras naciones más) para elaborar biodiésel.
Sin embargo, las cotizaciones de la harina de soja en el CME Group ajustaron a la baja en línea con los voluminosos embarques de ese producto que se proyecta que realice la Argentina luego del éxito de la acción denominada “dólar soja”.
Recién está comenzando el mes de octubre y ya se registraron ante la Secretaría de Agricultura embarques de harina de soja por 2,24 millones de toneladas versus 2,01 millones exportadas en el mismo mes del año anterior.
Las fábricas aceiteras argentinas, abarrotadas de mercadería, están operando a plena capacidad para poder cumplir con los embarques comprometidos con el gobierno nacional en el marco del régimen especial de tipo de cambio instrumentado el mes pasado.
La cuestión es que esa avalancha de oferta se presenta durante un proceso de expansión de la molienda de soja en EE.UU., el cual está fundamentalmente destinado a abastecer a la creciente industria del biodiésel de esa nación.
En tal coyuntura, la harina de soja, al menos en el corto plazo, tendrá una oferta abundante en dos proveedores clave del producto, razón por la cual la demanda no muestra ningún apuro por asegurar abastecimiento de la esa mercadería.
En la jornada de hoy miércoles la “pesadez” de la harina de soja terminó afectando negativamente a las cotizaciones del poroto en el CME Group.