La Bolsa de Comercio de Rosario estimó el aporte que el sector agropecuario realiza a las arcas del Estado Nacional por medio del cobro de los derechos de exportación, o retenciones.
El primer dato que surge de un informe que realizó el equipo económico de la entidad rosarina, da cuentas que entre el primer día del año y el último del mes de junio, es decir, todo el primer semestre, el agro aportó 2.660 millones de dólares por derechos de exportación a las arcas del Tesoro.
Si bien este dato resulta optimista respecto a lo recaudado durante el año anterior, configura un escenario a la baja respecto a las campañas anteriores a la previa.
Es que en 2023, el año de la gran sequía y el recorte fenomenal de producción, el agro aportó en el primer semestre, solamente 1.153 millones de dólares. En el mismo período de este año, esa recaudación creció respecto al año anterior, un 160%.
Sin embargo, este número registrado en los primeros meses de este año en curso, representa una fuerte caída respecto a los años anteriores al de la sequía, donde se podían considerar campañas agrícolas habituales.
Incluso esto es peor para los economistas rosarinos si se mira el panorama futuro: Por la caída de precios internacionales, se ajusta a la baja la proyección para 2024 y estiman 6.173 millones de dólares para el total anual.
De acuerdo al informe de la BCR, es estudio empieza optimista: “Luego de la histórica sequía que azotó a Argentina durante la cosecha de granos 2022/23 y que dejó como saldo una pérdida productiva de más de 50 Mt, la recuperación productiva del ciclo 2023/24 trae aparejado un mayor aporte de las principales cadenas del agro en materia de Derechos de Exportación (DEX), dada la persistencia del cobro de este tributo al sector”.
Acto seguido, los especialistas aseguran que pese a la notoria recuperación interanual, si se compara con los años anteriores, “este guarismo está por debajo de los 4.000 millones de USD recaudados por esta vía en los primeros seis meses de 2021 y 2022. Esto encuentra su explicación tanto en un mayor volumen de grano anotado para exportar en aquellos años, así como mejores precios de exportación”.
Para reflejar el actual escenario y tomando como referencia al complejo soja que es el que mayor presión impositiva por derechos de exportación presenta, los economistas observaron que en el primer semestre del año se llevan realizadas declaraciones juradas de venta al exterior (DJVE) por 16,2 millones de toneladas, considerando tanto poroto, harina y aceite, muy por encima de las algo más de 10 Mt de igual período del año pasado, pero por debajo de las 18 millones de toneladas del primer semestre del 2022, y las 22 millones del primer semestre del 2021.
“Asimismo, los precios FOB oficiales del primer semestre de 2024 en poroto, harina y aceite de soja estuvieron, respectivamente, un 21%, 24% y 15% por debajo de los precios FOB promedio del primer semestre del 2023 y un 32%, 20% y 46% por debajo del primer semestre del 2022”, aseguraron los especialistas firmantes Tomás Rodríguez Zurro, Natalia Marín y Julio Calzada.
Es importante aclarar que el 90% de los derechos de exportación se pagan hasta 5 días hábiles luego de realizada la DJVE al precio FOB oficial vigente.
En cuanto a la proyección de cara a lo que resta del año, en base a los volúmenes estimados actuales y a los precios FOB vigentes y tomando la distribución de DJVE promedio de las últimas cinco campañas, la BCR proyecta que el total de aporte por DEX de los principales complejos del agro alcance US$ 6.170 millones en 2024, más del doble de lo aportado en 2023 pero considerablemente por debajo de los guarismos del 2021 y 2022.